Esta mañana se ha producido el encuentro más esperado de la televisión, después de que Pablo Motos se encontrara con el actual Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, le ha tocado el turno a Ana Rosa Quintana, una de las presentadoras más longevas de la televisión contemporanea y que según ha confirmado ella misma, ha entrevistado a casi todos los líderes políticos de nuestro país desde que se dedica a la comunicación. Al parecer, Ana Rosa Quintana tenía ganas de esta conversación, como casi la mayoría de periodistas pero, ¿ha sabido guardar la compostura o el Sr. Pedro Sánchez se la ha comido? En las redes sociales se habla de todo un poco y es que resulta que la presentadora, parece que es más de un lado ideológico, que otro y no pasa nada, es lícito pero, se le ha notado y Sánchez, le ha comido terreno.
No sabemos si Pedro Sánchez vetará o no a Ana Rosa Quintana en la Moncloa pero, desde luego, la presentadora no podía ser imparcial y mostraba su opinión en la mayoría de las preguntas, cosa que un conductor de una entrevista, podría hacer, pero, ¿es correcto en este caso?: ''Yo no opino, yo describo'', mientras que Pedro Sánchez le dice que no, que sí que está opinando y ella insiste: ''No estoy opinando''. A lo el Presidente del Gobierno contesta: ''Si lo está haciendo''. Pero aún así, las redes sociales son las que están tomando la gran parte de decisión en este asunto y están hechando a los leones a la periodista, dictando sentencia tras esta entrevista: ''¿Es buena periodista Ana Rosa Quintana'' o ''Nuevamente Ana Rosa MIENTE''. El poder que tienen los periodistas en televisión y lo fácil que sería intentar ser imparcial pero, en este caso, a Pablo Motos y a Quintana, se les vio el plumero.
Ana Rosa Quintana defiende a Feijóo
Según Ana Rosa Quintana, le ha confesado a Pedro Sánchez que Alberto Núñez Feijóo votó en contra de quitar las banderas LGTBIQ+. Sin embargo, parece que no es cierto, las declaraciones de Feijóo con Pablo Motos decían: ''Las banderas no eran importantes, sino los derechos'' y, de esta manera, justificar los pactos con los partidos de ultraderecha de nuestro país. En 2023, los derechos humanos, no deberían ser motivo de debate, son imprescindibles. Así que no debería importar quien seas, si Pablo Motos o Ana Rosa Quintana, no tendríamos que tener ningún debate.