Hemos podido saber recientemente gracias al reality que Tamara Falcó estrenó hace un par de meses en Netflix que la joven vida de Isabel Preysler no era tan aburrida como se podría pensar, sino que la socialité tuvo una vida bastante ajetreada.
“La Marquesa” dejaba bien en claro algo, la relación de la Preysler con famosos de suelo americano y también las costumbres que tenía con estos de vivir la vida al máximo por las noches en New York, también conocida como la ciudad que nunca duerme.
¿Te suena de algo “Studio 54”? Este popular club nocturno de New York era el lugar predilecto de Isabel Preysler y de sus amistades para pasar la noche. Este club era considerado el “Sodoma y Gomorra” de la época, pero no se sabe exactamente lo que se hacía por Isabel y sus amigos en este lugar. Digamos que no se dio tanta información al respecto.
Sin embargo, también se sabe de la gran vida de lujos que tuvo Isabel y de toda la cantidad de personas que conoció en sus viajes a suelo americano. También hay que tener en cuenta que su apodo “Reina de corazones” lo ganó por algo y era siempre marcar la diferencia y situarse en la cima en todo lugar al que llegaba.
Studio 54 fue un lugar que Isabel Preysler explotó al máximo
Carolina Herrera llegó a compartir muchos momentos junto a Isabel Preysler y fue de sus varias amistades que tuvo estando en suelo americano. Esto se lo contó Carolina a Tamara Falcó mientras que se recolectaba información para “La Marquesa”. En palabras textuales de Carolina Herrera, dijo lo siguiente: “Nos hemos divertido como unas locas y hemos bailado hasta las cinco de la mañana”.
Este es un estilo de vida frecuente en aquellas mujeres y hombres de la alta sociedad que quieren disfrutar sus vidas y sus fortunas. Isabel Preysler no fue la excepción. El tema se complica un poco cuando hablamos de que en aquella época Isabel Preysler estaba casada con Julio Iglesias y se hace evidente que los celos fueron más que frecuentes.
Estos mismos celos son los que han causado su actual separación con Mario Vargas Llosa, el premio nobel que no estuvo de acuerdo en gran parte con la forma de ser de la socialité. También se habla de que la separación se dio por otros motivos, pero es un hecho de que ahora mismo están separados y no parece que vayan a volver juntos.
Ahora Isabel Preysler no lleva una vida tan animada, pero eso no quiere decir que lleve una vida aburrida
Aunque ahora mismo Isabel no lleve una vida en la que dure toda la noche despierta, rodeada de todo tipo de celebridades y al mismo tiempo consumiendo alcohol a más no poder no quiere decir que su vida sea aburrida. Se le ha visto participando en varios proyectos, pero lo cierto es que ahora mismo su cabeza está algo ocupada en la relación de su hija Tamara con Íñigo Onieva y todo lo que le dicen de él.