Desde que acabase la emisión de 'Sálvame' son muchas las noticias que estamos sabiendo acerca de los colaboradores, además de que se encunetran grabando una extensión del programa más existoso de los últimos 14 años en Telecinco y que será para Netflix, aún sin nombre, pero ya están grabando en Miami, donde están dando muchas alegrías y mucha guerra. Sin duda, quedará un docureality muy real, porque las noticias, les llegan solas y las imágenes que se están filtrando de los colaboradores por los programas de LATAM son, maravillosas (como diría Isabel Pantoja).
Pero, lo que no esperabamos es la noticia que hemos conocido esta semana. Todos sabemos que la relación entre Rocío Carrasco y sus hijos es, totalmente, nula, de hecho, hasta con su hermana. Además, Telecinco, publicó un documental llamado 'Contar la verdad para seguir viva', donde la hija de Rocío Jurado, contaba como ha sido su vida con Antonio David Flores y cómo es su relación con sus hijos, confirmabndo que no se sentía preparada para manetener una relación con ellos. Pero, eso, al parecer, no le impide relacionarse con los hijos de sus amigos y eso es lo que ha pasado, las hijas de Kiko Hernández.
Rocío Carrasco ama a las niñas de Kiko Hernández
El propio Kiko Hernández ha sido quien ha dado una entrevista en exclusiva para la revista Lecturas, en la que se abre en canal y donde ha contado toda su relación con Fran Antón, los preparativos de su boda y ha hablado sobre su relación real con Rocío Carrasco: ''Rocío es muy amiga mía, va a venir a mi boda'', esto ha sorprendido a muchos que no sabían de la relación del colaborador con la hija de la más grande. Pero, no solo es eso, al parecer la exmujer de Antonio David Flores, tiene el instinto maternal muy vivo (aunque no sea con sus hijos) y pese a todo lo sucedido: ''Le da mucho amor a mis hijas'', confesaba el colaborador en la entrevista exclusiva. ¿Cómo habrá sentado esto a la familia Flores? Está claro que no es que no le gusten los niños o cuidar de los pequeños, es que directamente, el problema, lo tiene con los suyos, no con los de sus amigos.
Estas declaraciones, dejan claro que Rocío Carrasco no quiere estar cerca de sus hijos y prefiere pasar tiempo al lado de los que no son suyos y, de hecho, se ha ganado un lugar en el corazón de Kiko Hernández, que le invitará hasta a su boda.