En un mundo donde las redes sociales se han convertido en una ventana a la vida de las celebridades, cada publicación puede desencadenar una avalancha de comentarios y opiniones. Recientemente, Khloé Kardashian ha experimentado esto de primera mano cuando una foto suya desató un debate sobre la autenticidad de su apariencia y las decisiones que ha tomado respecto a su imagen a lo largo de los años.
Y es que, a medida que crecía ante la mirada del público, Khloé enfrentó críticas sobre su apariencia que, según ella misma ha compartido, la afectaron profundamente. En episodios pasados de "Keeping Up with the Kardashians", ha hablado abiertamente sobre las inseguridades que enfrentaba debido a las comparaciones con sus hermanas y los comentarios negativos sobre su apariencia. Estas experiencias la llevaron a tomar decisiones importantes sobre su imagen, incluyendo procedimientos quirúrgicos y cambios en su estilo de vida.
La imagen en Instagram que desató la polémica
Una reciente comparación visual entre Khloé Kardashian hace más de una década y su apariencia actual ha causado un gran revuelo en las redes sociales. Una imagen, compartida en su cuenta de Instagram hace apenas unos días mientras posaba junto a su amiga Erin Paxton, revela de manera sorprendente cómo ha evolucionado la imagen de Khloé a lo largo de los años, llegando al punto de ser comparada con la actriz y ex modelo Denise Richards. Aunque muchos sugieren que este cambio, que incluso supera el de su hermana menor, Kylie Jenner, podría ser el resultado de retoques digitales, la realidad es que Khloé Kardashian ha dedicado más de una década a su transformación física.
La evolución física de Khloé a lo largo del tiempo
En el pasado, Khloé se destacaba por tener una nariz más ancha y menos definida, así como una cara con contornos más redondeados y un mentón ligeramente más cuadrado. Su figura, en aquel entonces, mostraba una robustez más evidente, con brazos más anchos y una notable flacidez, como se puede apreciar en una imagen que se remonta a 2008. En esta fotografía, Khloé aparece luciendo un vestido azul y negro diseñado por Hervé Léger durante el lanzamiento de la segunda temporada del reality en el que participaba con su familia, Keeping Up With the Kardashians.
Poco tiempo después, la tercera hermana Kardashian tomó la decisión de transformar por completo su apariencia al embarcarse en un viaje de pérdida de peso significativa y múltiples procedimientos de cirugía estética para remodelar sus rasgos faciales. En la actualidad, su nariz luce mucho más estilizada y respingada, producto de una rinoplastia. Además, se sometió a una bichectomía para resaltar aún más los ángulos de su rostro y ha recurrido a múltiples sesiones de bótox y ácido hialurónico para realzar su belleza.
Aunque Khloé ha afirmado que su notable pérdida de peso se debe a una estricta rutina de ejercicio y a un riguroso régimen alimentario, los expertos señalan que también recurrió a una “BBL” o "Brazilian Butt Lift", una intervención estética en la que se extrae grasa de distintas áreas del cuerpo para luego ser inyectada en los glúteos, con el fin de aumentar, ensanchar o remodelar esta zona. Además, la celebridad decidió abandonar su característico pelo castaño al decantarse por una melena rubia, un cambio de imagen que ha mantenido en los últimos años.