La relación entre Julio Iglesias e Isabel Preysler a día de hoy da mucho de qué hablar, pues Julio Iglesias es uno de los cantantes más reconocidos de la historia de la música en español e Isabel Preysler es una socialité de lo más conocida. Sin ningún tipo de dudas, dan mucho de qué hablar, incluso el pasado de los mismos todavía da material suficiente como para hacer un buen tema de conversación.
¿Era buena la relación entre Julio Iglesias e Isabel Preysler? Esto es algo que se podría cuestionar sin ningún tipo de problemas, pues aunque la relación entre ambos era bastante buena, con el paso de los años se fue tornando cada vez más y más insoportable. La relación entre los dos se encrudecía conforme pasaban los años y conforme Isabel Preysler era madre, pero todo por culpa del cantante, el cual llevaba una vida de diversión lejos de su esposa.
El mismo Julio Iglesias ha llegado a decir que ha estado con más de 3.000 mujeres a lo largo de su vida sentimental, lo cual es demasiado, pero Julio Iglesias era considerado un “casanova” por excelencia. A cada parte que iba siempre dejaba corazones rotos, se acostaba con mujeres una sola noche y no las volvía a llamar, y todo esto mientras estaba con Isabel Preysler.
La vida de “pareja” que vivió Isabel Preysler “al lado” de Julio Iglesias
Como hemos dicho, luego de la boda y al principio de la relación el amor que se tenían era muy grande. Se llevaban muy bien, tanto que Isabel Preysler no dudaba en lo más mínimo en ir con su esposo a todas partes por sus giras y conciertos. Esta era feliz con eso y luego de su primer hijo siguió haciendo lo mismo, acompañando a su esposo a todas las giras posibles y estando con él todo el tiempo.
Sin embargo, hubo un punto en el que Julio Iglesias se ausentaba mucho más y, por ende, Isabel Preysler comenzó a quedarse sola en su residencia de aquel entonces. Pese a esa distancia, cuando se encontraban, los encuentros eran apasionados, tanto que la relación dio fruto a otros dos pequeños, pero fue después de esto que todo se encrudeció mucho más.
Isabel Preysler no podía viajar tanto con Julio Iglesias debido a su obligación con sus hijos pequeños y por eso se quedaba en su residencia. Cada vez que llamaba al cantante le respondía una mujer distinta y las discusiones eran habituales cuando se veían las caras, pero la peor parte del asunto es cuando sabemos que Julio Iglesias le prohibía a Isabel Preysler salir de su casa. Obviamente podía hacerlo, pero solo con permiso de su esposo. Las amistades de Isabel Preysler dicen que fue una época difícil para la socialité y que esta mantenía la calma debido a que mantenía la compostura cada vez que discutían. Si no hubiera sido por su teléfono, la Preysler no habría tenido contacto con el exterior, o al menos eso es lo que dicen.