Ya ha pasado algo de tiempo desde que Íñigo Onieva se disculpaba públicamente por haberle sido infiel a la hija de Isabel Preysler, la cual era su prometida en aquel momento y que parecía que no iba a perdonar fácilmente la infidelidad de Íñigo.
Sin embargo, a día de hoy, Tamara Falcó e Íñigo Onieva han vuelto a tener una relación fructífera en la que ambos se han dejado ver más que alegres y contentos. ¿Habrán funcionado las disculpas del empresario o hay algo más?
Según lo que se sabe, es posible que haya habido un intermediario, y este se presume ha sido el cura de la familia, el cual tiene muy buena relación tanto con Isabel como con Tamara y también con su hermana.
Hace meses, mientras que la relación Onieva-Falcó sufría aquel percance de separación, un cura llegó a la vivienda de los Preysler a hacer una visita. Se decía que esto quizás era para anular los preparativos del matrimonio entre Tamara y su novio o, más importante, que iba a darle apoyo a Tamara.
Todos saben lo religiosa que es Tamara Falcó y su madre
Si algo tenemos bien en claro todos, es que Tamara Falcó es muy devota de la religión y todo lo que conlleva esto, tanto que incluso se sabe que sigue virgen para el matrimonio. Por su parte, la visita que recibió de este cura de la familia (y que le siguió recibiendo) serviría como consejo para su situación.
En el momento en el que se sabe que la visita de dicho cura se hizo, se sabe que fue justo después de que Íñigo le diera disculpas públicamente a Tamara. Es posible que el cura haya servido para que esta aclarara un poco sus pensamientos, ya que, como sabemos, ahora mismo la pareja vuelve a estar unida. Sin embargo, muchos dicen que el cura quizás estuvo ahí por otras razones.
A Isabel Preysler le han avisado que a este matrimonio puede ir de todas formas, pero todo menos bien. Es por eso que se piensa que este cura quizás ha intercedido para que Tamara abra los ojos. Una infidelidad no es de Dios, eso todos lo sabemos, pero entonces no se explica muy bien la razón por la que Tamara volvió con Íñigo.
Por ahora se sabe que Tamara va adelante con la boda y que será el mismo cura que le visitó el que la va a casar
Luego de aquella disculpa de un par de meses, Tamara y su prometido siguieron adelante con la relación y al mismo tiempo con la boda. Se espera que se casen antes de este año, pero sabemos muy bien que Isabel Preysler no está del todo de acuerdo con esto y quizás quiera interceder de alguna forma, y qué mejor forma de hacerlo que sino a través de Dios y la fé de su hija en él. Como se ha podido ver, la Preysler no está del todo tranquila con esta situación ni con el novio de su hija y mucho menos luego de lo que le hizo.