Aunque no debería ser así, Álex Lequio sigue dando de qué hablar. Primero, Ana Obregón ha dejado en claro que, Ana Sandra Lequio, es la hija de Álex Lequio, cumpliendo así, según ella, con su última voluntad, la cual era ser padre. Se había llegado a un acuerdo y por eso mismo Ana Obregón tenía la carga genética de su hijo para poder utilizarla en una gestación subrogada, aunque hay que mencionar que en un principio no se sabía que el hijo de Alessandro Lequio era el padre de la pequeña que ha nacido mediante un vientre de alquiler.
Sin embargo, todo sale a la luz, de hecho, Ana Obregón también ha querido llevar a la luz un libro que estaba escribiendo su hijo con sus memorias y que quería publicar antes de fallecer, pero que, lamentablemente, no pudo hacerlo. Por eso mismo la actriz decidió también cumplir con esta voluntad y deseo de su hijo publicando el libro que este estaba escribiendo, el cual lleva por nombre “El Chico de las Musarañas”.
El detalle es que la cosa no acaba aquí, ya que en dicho libro podemos encontrar un mensaje de Álex Lequio hacia su mejor amigo que es capaz de ponerle los pelos de punta a más de uno, aunque del mensaje en sí hablaremos más adelante.
“El Chico de las Musarañas”, una recopilación de las vivencias del hijo de Alessandro Lequio
Este libro despierta el interés de más de uno debido a que Álex Lequio llevó una vida, cuanto menos, interesante. No solo era hijo de Ana Obregón, sino que también lo era de Alessandro Lequio, el cual sabemos, es prácticamente familia de Felipe VI. Es por eso que un libro con sus memorias podría llamar la atención de más de uno, sin embargo, aprovechando la oportunidad, el hijo de la famosa actriz no iba a perder la oportunidad de dejar un mensaje para sus amigos, y decidió dejarle un mensaje a un amigo muy especial.
Este amigo era Justin, a quién conoció en la universidad de Estados Unidos, Duke. Lo consideraba su mejor amigo en aquella época y le mantuvo especial cariño incluso en el final de su vida, por lo que en dicho libro podemos leer el siguiente mensaje dedicado a Justin: “My bro Justin, en caso de que me pase algo, lo único que voy a pedirte son dos cosas: la primera que le digas a mi padre y a mis tías que, por favor, cuiden mucho de mi madre, estará destrozada”.
Sin embargo, el mensaje no acaba aquí, pues continúa con la segunda petición de Álex Lequio, la cual dice lo siguiente: “la segunda es que cuando vayas al cielo me busques, por favor. Te quiero hasta el infinito”. Aunque no lo parezca, un mensaje así y con tal profundidad teniendo conocimiento de lo que vivía Álex Lequio en aquel momento es capaz de dejarle los pelos de punta a más de uno al leerlo.