Son muchos los rumores que han surgido en las últimas semanas a que la Infanta Elena y la Infanta Cristina podrían estar enfadadas con su Felipe VI al no pronunciarse públicamente sobre las informaciones de que su padre tendría una hija secreta.
Esto representa sin duda un nuevo obstáculo para la Familia Real a pesar de que el emérito haya negado que Alejandra sea su hija: "Niego absolutamente haber tenido relación amorosa alguna con la señora doña Rosario Palacios y consecuentemente haber tenido una hija con ella. Rechazo y condeno por falso cuanto se ha publicado en relación con este inventado asunto", aseguró el monarca a EFE.
Por su parte Casa Real ha decidido mantenerse al margen de las afirmaciones sobre esta presunta paternidad, algo que habría enfadado a las Infantas Elena y Cristina. Ambas no entenderían la posición de su hermano de no dar la cara públicamente, y es por eso que le habrían llamado para comunicárselo personalmente.
Las infantas estarían muy preocupadas por el honor de sus progenitores y no entenderían el silencio de Felipe VI al no negar públicamente esta información, una información que deja en muy mal lugar a la Reina Sofía.
La Infanta Elena, siempre discreta
La Infanta Elena ha reaccionado públicamente con una aparente indiferencia a estos rumores. Protegida bajo un sombrero y unas gafas de sol, la madre de Froilán y Victoria Federica se ha 'refugiado' en su teléfono para ignorar las preguntas de los medios sobre su reciente enfrentamiento con Felipe VI. Tampoco ha desvelado cómo se encuentra Doña Sofía ni cómo le han afectado las noticias sobre la presunta paternidad secreta de Don Juan Carlos.