Los matrimonios han existido desde siempre, tanto los legítimos como los arreglados, enlaces que se realizan con una finalidad externa al amor de las dos personas comprometidas a estar juntas “hasta que la muerte los separe”, y esto es algo bastante común en algunas culturas aún en los tiempos actuales, pero así como existen este tipo de matrimonios, están los que se mantienen juntos por obligación a pesar de que el amor terminó hace tiempo por pura conveniencia, y este sería el caso de Felipe VI y Letizia.
La batalla que tuvo que librar el rey contra casi toda la corona para poder casarse con Letizia fue desproporcionada. El entonces príncipe de Asturias venía de una serie de parejas de las que estaba profundamente enamorado, como Isabel Sartorius o Eva Sannum, pero la decisión de sus padres fue tajante y sin lugar a peros, por lo que tuvo que separarse de dos mujeres muy importantes para él, entre otras, pero con Letizia no ocurrió lo mismo. Felipe VI se planteó entre casarse con Letizia o la vida de soltero, y ahora más de 20 años después, parece que el rey intenta escapar del matrimonio tanto como sea posible.
Felipe VI y Letizia no se tratan, sus problemas han destrozado su relación
El matrimonio de Felipe VI y Letizia es el único que se mantiene vigente entre los hijos de los eméritos, pues sus hermanas, Elena y Cristina ya se han divorciado de Jaime de Marichalar e Iñaki Urdangarin respectivamente. Se cree que el divorcio de los reyes es cuestión de tiempo, pero a pesar de que su relación está en el peor momento posible, no parecen aceptar el divorcio como una opción, principalmente porque no es lo mejor para la corona.
Desde antes de Jaime del Burgo ya existían bastantes problemas acumulados entre los reyes, los gestionaban de alguna forma pero el abogado y su revelación al mundo de su relación con Letizia se convirtieron en la gota que derramó el vaso. Nada ha vuelto a ser lo mismo para Felipe VI y Letizia y probablemente no lo sea nunca, especialmente porque Felipe VI ha cambiado mucho su trato hacia su esposa.
Generalmente, el rey era cómplice de las decisiones de su esposa, pero ahora todo es muy distinto y no hay forma de que Letizia tenga alguna autoridad sobre Zarzuela, además el rey ha demostrado comportamientos bastante negativos hacia la consorte, pues ha pasado a tratarla de formas humillantes en privado, incluso enfrente del personal, aunque la única excepción es cuando están sus hijas pues la prioridad siguen siendo ellas.
Letizia, por su parte, no es que haya empezado con sus discusiones e insultos desde lo de Jaime del Burgo. 2023 fue un año marcado por las discusiones para los reyes y siempre se escuchaba que Letizia llegaba al punto de insultar a su esposo e incluso arrojar objetos cuando las cosas no iban como deseaba. Hoy día las cosas se ven muy mal para ella, pero en general los reyes están inmersos en un mal momento.