Las tensiones aumentan entre los Borbón, y aunque esto no es nada nuevo sorpresivamente no parece que la intensidad vaya a bajar nunca, pues siempre encuentran la forma de formar escándalos que no se ven opacados por otros anteriores. La excepción a la regla es el caso Nóos pero eso ya es un tema aparte, pues lo que hoy nos compete va enlazado con una de las sobrinas del rey. Él título ya deja claro cual, Victoria Federica, la hija mayor de la infanta Elena, una influencer conocida por sus cuestionables actitudes y elevado caché, especialmente esto último va relacionado con su última polémica.
Los hijos de la infanta Elena, tanto Froilán como Victoria Federica, siempre han resultado disruptivos para la corona. Son dos imágenes que no necesitan, que les sobran, por lo que hacen lo posible por controlarlos pero muchos son los momentos en los que, si ponemos atención, se pueden escuchar los gritos y portazos provenientes de Zarzuela desde cualquier parte de España. La reina consorte lleva especialmente mal el trato con sus sobrinos pues son todo aquello que ella evita y rechaza para sus hijas. Leonor de Borbón es lo contrario a Victoria Federica, siendo esta última la abandonó sus estudios para perseguir su sueño y además ganando mucho dinero con ello. La princesa por su parte se mantiene rígida a sus estudios, y recientemente ingresó a la academia militar, en donde estará mientras Victoria Federica seguramente se la pase de fiesta en fiesta.
La movida vida de Victoria Federica le sale rentable
Algunos podrán criticar los métodos de la hija mayor de la infanta Elena, pero no pueden cuestionar sus resultados, ya que en el transcurso del año numerosas veces nos hemos enterado de todos aquellos negocios en los que se involucra Victoria Federica aprovechando su estatus y obviamente su apellido. La presencia solicitada de un Borbón no sale barata, y ella lo demuestra.
Solo durante la mitad de agosto, la sobrina menos favorita de Letizia ha participado en 9 photocalls, en los cuales habría cobrado una tarifa de 3.000 euros por cada uno. Cualquiera que sepa sumar dos y dos llegará a la conclusión de que 27.000 euros en medio mes es mucho dinero, y recordemos que solo estamos hablando de photocalls.
Victoria Federica se tomó en serio el plan de volverse influencer. Muchas jóvenes soñarían con ingresar a ese mundo con la facilidad y naturalidad que lo hizo la hija de la infanta Elena, la cual a pesar de sus polémicas a raíz de sus actitudes, no se puede negar que le renta, y eso que ni siquiera estamos tomando en cuenta sus ganancias externas a photocalls, como podrían serlo colaboraciones con marcas, publicidad, asistencias a eventos de diverso tipo, y cualquier otra actividad que pueda beneficiarse de la imagen de una influencer y de paso, Borbón.
Todos somos conscientes de que, de seguir así podría llegar un punto en el que los reyes tomen acciones como hicieron con Froilán, pero al menos de momento parece que Victoria Federica tiene vía libre para aprovechar lo que la vida le ha dado, además, cuenta siempre con el apoyo incondicional de su padre, Jaime de Marichalar.