No es que sea precisamente ningún secreto que, por mucho que la relación entre Felipe VI, la Reina Letizia y sus hijas Leonor y Sofía con la familia del rey no es que sea precisamente muy fluida, hay ciertos nombres dentro de la Zarzuela que no forman parte de la batalla que mantienen, por ejemplo, la reina Emérita Sofía con la reina actual, Letizia.
Uno de ellos es el de Irene de Grecia y Dinamarca, la hermana de la reina emérita Sofía, una mujer que lleva años viviendo junto a su hermana y que, como bien saben aquellos que mejor la conocen, tiene una personalidad y un carácter que se diferencia claramente del resto.
Es más, tal y como ha reconocido en su biografía, no es casualidad que muchos miembros de la familia hablen de ella como la tía Pecu: “Me llaman así porque soy la excéntrica de la familia, la peculiar”.
La salud de Irene de Grecia no es la mejor
Pero el problema real en este caso es que, más allá de que sea más o menos peculiar, el hecho es que la hermana de la reina Emérita Sofía no está pasando por su mejor momento a nivel de salud.
A sus 81 años, tal y como apuntan desde el entorno de la Zarzuela, Irene está empezando a tener serios problemas ya no tan solo de movilidad sino cognitivos. “Aunque no hay un diagnóstico, sufre un deterioro cognitivo. Doña Sofía está preocupada por su estado”, apuntó hace un tiempo la revista Hola. Una información que también se apuntó desde Vanitatis, donde se dijo que “Sufre un deterioro cognitivo propio de su edad que hace que a veces ande perdida”.
Evidentemente desde la Zarzuela prefieren mostrarse muy discretos en este sentido, pero parece ser que han sido varias las ocasiones en las que, en algunos momentos complicados, la hermana de la reina Emérita Sofía ha tenido momentos en los que no ha reconocido algunos miembros de la familia, algo que evidentemente preocupa a su hermana que sigue estando muy pendientes de su estado de salud.