Se ha repetido mucho que para la realeza uno de sus activos más importantes es la imagen, después del dinero son pocas las cosas que necesitan tan desesperadamente como la aceptación de la población, y eso ha “justificado” muchas de las decisiones que Zarzuela ha podido tomar en cuanto a intentar encubrir ciertas actividades o cosas que han hecho los integrantes de la familia real para evitar escándalos, aunque inevitablemente algunas cosas se terminan conociendo como rumores dados por verificados o verdades a medias, además de que el internet hace muy difícil mantener ese secretismo bajo presión a los medios de hace décadas.
La infanta Elena ha sido encubierta por Zarzuela, deudas a la luz
Una de las royals más queridas de España como lo es la infanta Elena no puede tener ningún tipo de escándalo que haga daño a su imagen, y a pesar de que ha tenido incontables momentos donde se termina hablando de ella, la establecen siempre como una “víctima” y no como la responsable de algo.
En este caso, pudimos conocer que la hermana mayor del rey tuvo unas cuantas deudas con Hacienda. Esta información habría salido antes de lo debido a la luz de no ser porque desde Casa Real hicieron lo posible para que no se hablara de ello, y una vez se confirmó de parte de la propia Agencia Tributaria, no tuvieron más que dar excusas del por qué esto había ocurrido, y por qué no era culpa de la infanta Elena.
La infanta llegó a ser deudora por un monto de 510 euros. Dicha deuda se originó a raíz de una empresa bajo el nombre de Global Cinoscéfalos. La relación de la hermana del rey con esta empresa es directa puesto que fue fundada por ella y era la única administradora de la misma. Su capital estaba valorado en 3.600 euros y una vez se dio a conocer la existencia de la empresa esta se disolvió, o eso “creían”.
El diario CincoDías informó que Global Cinoscéfalos operó durante 8 meses hasta que finalmente se “disolvió”, lo que aparentemente la infanta Elena no sabía es que el cierre de la empresa no se ratificó correctamente, lo cual habría sido equivalente a que siguiera operando mientras ella seguía siendo legalmente la única dueña de su capital.
Hacienda no lograba ubicar a la infanta Elena
En su momento el portavoz de la casa real tomó la responsabilidad de dar luz sobre el asunto, y la versión oficial argumentaba que esta situación tardó tanto en resolverse al punto de generarse una deuda porque la infanta Elena era totalmente ignorante de la situación. No tenía nada que ver con la hermana del rey no queriendo cumplir con Hacienda, sino que para ella todo ya había quedado zanjado y el tema no volvería a ser un problema.
Los abogados de la infanta Elena habían dejado el proceso en manos del departamento jurídico de Zarzuela, dieron por hecho que la empresa había sido liquidada y no habría algún tipo de problema, pero “se equivocaron”, pues la infanta terminó con una deuda de 510 euros y la mirada crítica de toda España.