Mucho antes de que los derechos de los animales fueran un problema aceptado por la sociedad, la reina Sofía ya era una fiel defensora. No es un secreto que, durante muchos años, ha tenido perros y gatos a su alrededor. Una de sus más grandes contribuciones es participar en campañas de protección de animales en peligro de extinción. Además, no deja de asistir a cualquier evento que esté a su alcance y trate sobre animales. Ahora bien, lo más curioso es que, entre sus mascotas, hay un animal salvaje. Un espécimen que asusta a los que visitan Zarzuela.
En uno de sus viajes a China, la reina Sofía y el rey Juan Carlos I regresaron con varios osos pandas. El zoo de Madrid se volvió el hogar de estos animales a partir de su llegada en 1978. Con el paso de los años, la madre de Felipe VI se ha reunido con los osos pandas en el zoológico en ciertas ocasiones. Aunque no es la única vez que regresaron de viaje con una criatura poco común. El amor de la emérita por los animales es superior, por ello evita usar pieles, es vegetariana y pocas veces asiste a una plaza de toros. ¿Cómo podría negarse a tener un felino tan majestuoso?
Un guepardo en Zarzuela, la mascota de la reina Sofía
A lo largo de los 38 años del reinado de Don Juan Carlos, los reyes recibieron regalos de todo el globo terráqueo. Algunos tan comunes como joyas, dulces, botellas de vino y libros. En cambio, hubo otros fuera de serie. En un viaje a Etiopía, a los eméritos les regalaron un guepardo. Causó un gran revuelo en Zarzuela cuando llegó el mensaje: “Vamos con guepardo, preparen alojamiento para el animal”. Sabino Fernández Campo, quien en ese entonces era el secretario de la Casa Real, tuvo que pedir ayuda al zoológico.
Se trataba de un cachorro de guepardo, una criatura feroz con una investidura muy elegante. Para los antiguos egipcios era una mascota, como un perro o un gato en la actualidad. Al regreso de la pareja, el animal se instaló en Zarzuela. En sus primeras semanas en la residencia, las infantas y el príncipe fueron a conocerlo. Así que lo sacaron de la jaula, pero el felino se deshizo de los cuidadores y corrió hacia los bosques que rodean al palacio. Pese a que el monarca intentó alcanzarlo, fue imposible.
El guepardo es uno de los animales más veloces del mundo. En promedio, acelera hasta 96 km/h en cuestión de segundos. Tras estos acontecimientos, se declaró su búsqueda. Lo consiguieron luego de crear una estrategia con una gueparda. En el libro Los hombres de Felipe VI, José Apezarena revela algunos de los secretos que rodean al Jefe de Estado. En una entrevista con el medio Pronto, el periodista mencionó el asunto del guepardo. “Sí, andaba suelto por los jardines. Los visitantes se llevaban unos sustos tremendos. Y cuando creció, tuvieron que encerrarle”, contó.
Con todo el cuidado que representa tener un guepardo en el palacio, la reina Sofía decidió mantener a dicha criatura. ¿Qué otro animal salvaje tendrá?