La reina Sofía y su hermana Irene son muy aficionadas al espiritismo y el esoterismo. Según una información difundida por diversos medios, ha trascendido que presuntamente las dos hermanas suelen montar sesiones de espiritismo en Marivent, la residencia de verano de la familia real en Mallorca.
Sofía, fan del ocultismo al igual que su madre
Supuestamente las sesiones de espiritismo se celebran en la intimidad, pero algunas veces las dos hermanas han invitado a amigos. En las sesiones, la reina Sofía y su hermana Irene se ponen en contacto con sus difuntos familiares, entre ellos, su madre la reina Federica de Grecia, quien falleció en 1981, y su padre Pablo de Grecia, quien murió el 6 de marzo de 1964.
Sofía y su hermana Irene son muy creyentes en el espiritismo y el esoterismo, pero parece que es un gusto que ha sido heredado, pues la madre de las dos hermanas, la reina Federica de Grecia, era también muy aficionada a estas prácticas.
Relación entre la reina Sofía y su madre
La reina Sofía, de 83 años, es una de las figuras públicas más reconocidas de España. Sin embargo, su vida personal ha estado marcada por la tragedia, la polémica y la soledad.
La infancia de la mujer de 85 años fue muy difícil. Su padre, el rey Pablo I de Grecia, fue asesinado cuando ella tenía solo seis años. Su madre, la reina Federica de Grecia, era una mujer fría y distante, que no supo dar a su hija el cariño y el apoyo que necesitaba.
La emérito se casó con el entonces príncipe Juan Carlos de Borbón en 1962. La pareja tuvo tres hijos: Felipe, Elena y Cristina. Sin embargo, el matrimonio fue siempre conflictivo. El rey Juan Carlos era un hombre mujeriego, y la reina Sofía era una mujer reprimida y controladora.
En 2014, el rey Juan Carlos I abdicó en favor de su hijo, Felipe VI. La reina Sofía se convirtió en reina emérita, y se retiró de la vida pública. Sin embargo, no ha podido escapar de la polémica. En 2020, se publicó una biografía no autorizada de la reina, en la que se revelaban detalles escabrosos de su vida personal. Dos años después fue investigada por el Tribunal Supremo por su posible implicación en el caso Nóos, un escándalo de corrupción que involucró a su yerno, Iñaki Urdangarin.
Actualmente la reina Sofía ha vuelto a ser noticia por sus sesiones de espiritismo, su mala relación con su nuera Letizia y lo alejada que se encuentra de sus nietas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, y de su hijo Felipe VI.
La reina Sofía es una mujer compleja y contradictoria. Es una mujer culta y refinada, pero también es una mujer atormentada por su pasado. Su vida ha estado marcada por la tragedia, la polémica y la soledad, por lo que no es de extrañar que acuda a su hermana Irene para hacer sesiones de ocultismo y así compartir un momento en familia y al mismo tiempo olvidarse de sus problemas.