La Reina Sofía siempre se ha caracterizado por ser una mujer que ha tenido muy claro desde el primer momento en el que supo que iba a casarse con Juan Carlos I, el futuro rey de España, cuál iba a ser su papel dentro de la institución.
En este sentido, no es que sea ningún secreto que Sofía supo incluso antes de casarse que su futuro marido no era precisamente el hombre más fiel del planeta, y que su relación estaba basada única y exclusivamente los intereses de las dos monarquías, la española y la griega.
Sin embargo, como bien saben los que han seguido de cerca de la corona española desde hace años, Sofía siempre ha sabido encontrar el tono perfecto en todas y cada una de las ocasiones en las que se ha enfrentado a la prensa en sus actos oficiales, confirmando que es y ha sido uno de los miembros más respetados y queridos de la corona en nuestro país.
Pero cabe tener en cuenta que ese papel también lo ha ejercido de puertas hacia dentro, especialmente con sus hijos, las infantas Elena y Cristina y el hoy rey Felipe VI. No es casualidad entonces que, lejos probablemente de lo que le habían recomendado por muchos en Zarzuela, la Reina Sofía fuera una de las que más apoyaron a su hija la infanta Cristina durante los peores momentos de Iñaki Urdangarin.
La Reina Sofía rompe su relación con Iñaki Urdangarin
Consciente de que su hija Cristina apoyaba al 100 × 100 a su marido incluso en los peores momentos, Sofía no tuvo ningún tipo de problema en seguir manteniendo la buena relación que mantenía con su yerno, e incluso fue a visitarlo a prisión en varias ocasiones.
Eso sí, cuentan desde el entorno de la mujer de Juan Carlos I que, desde que la reina se enteró de la nueva relación de su yerno con Ainhoa Armentia, la relación se ha roto por completo, como no podía ser de otra forma teniendo en cuenta lo mal que lo ha pasado su hija la infanta Cristina en todo este tiempo.
Por mucho que durante más de cuatro años Reina Sofía tuviera encuentros con Iñaki que no acababan precisamente los medios de comunicación teniendo en cuenta la repercusión que podrían tener, hoy en día Sofía está volcada en ayudar a su hija y, por lo tanto, ya no quiero saber nada de Urdangarin.