Los que han seguido desde hace ya muchos años toda la actualidad de la casa real española sabe muy bien que la Reina Sofía ha sido una de las figuras más importantes en este sentido. Una mujer que, eso sí, ha guardado silencio durante muchísimos años en todo lo que ha rodeado y sigue rodeando las infidelidades de su marido.
Es más, a diferencia de lo que ocurría hace un tiempo, cuando todo lo relacionado con los entonces el rey Juan Carlos y Sofía, especialmente los negativos, apenas aparecían los medios de comunicación, hoy en día es muy habitual que diferentes polémicas respecto al padre del actual rey Felipe VI aparezcan de forma constante los medios de comunicación, especialmente todo lo que rodea a sus infidelidades.
Sin embargo, llama especialmente la atención que la Reina Sofía puede presumir también de haber llevado a cabo una de las infidelidades más sonadas, aunque en este caso no se trata de un tema de relaciones personales, sino más bien de otro de los aspectos que siempre han sido centrales en la vida de la madre de la actual rey: la moda.
La Reina Sofía y su ‘infidelidad’ a Valentino
Y es que no es que sea precisamente ningún secreto que, como ocurre con tantas otras figuras de las casas reales en Europa y ocurre también actualmente con la ReinaLetizia, la ReinaSofía siempre ha tenido pasión por la moda, y en concreto, por un modisto que puede presumir de haber sido uno de los más importantes en la historia de esta industria: el italiano Valentino.
Han sido innumerables las veces que, durante su reinado y después de él, la ReinaSofía ha dejado muchos con la boca abierta con sus espectaculares diseños, diseños que siempre han llevado la firma de este modisto italiano y que han convertido al armario de la Reina Sofía en uno de los más deseados dentro de las casas reales en Europa.
De ahí que no fueron pocos los que se sorprendieron cuando se supo que, para el cuadro de la familia real en el que aparece la Reina Sofía con su marido y sus hijos y que pintó el pintor español Antonio López, la Reina Sofía optara por un diseño de la modista española MargaritaNuez, con quien la madre de Felipe VI tenía muy buena relación desde hace ya muchos años y que había sido también su modista de confianza.