Las tensiones se han acumulado en Zarzuela desde hace años, siempre rondando a los integrantes de la familia real, las infantas Cristina y Elena, Juan Carlos I, o los hijos de la infanta Elena, por nombrar casos particulares, pero hay ocasiones en las que la polémica llega hasta las raíces de la realeza. Felipe VI y Letizia no se salvan, entre ellos siempre surgen rumores de separación por diferencias que han sucedido con el paso de los años, sin embargo, el tema de esta ocasión concierne más a sus hijas, Leonor y Sofía de Borbón.
La princesa de Asturias será la madrina de su hermana menor
Desde hace tiempo se sabe que Letizia se ha forjado una buena cantidad de enemigos en la casa real y sus inmediaciones, sin embargo, a diferencia de las hermanas del rey o su padre, Juan Carlos I, una de sus enemigas más sonadas vive aún en Zarzuela, se trata de Sofía de Grecia, la madre de Felipe VI quien, sí o sí debe mantener algún rencor personal con Letizia por lo mucho que la ha apartado de su familia, más precisamente de sus nietas.
Una de las pruebas más recientes de esto llegó con motivo de la confirmación de la menor de las hijas del rey, la infanta Sofía, cuya madrina fue alguien que quizá algunos no esperaban. El cargo le tocó a Leonor de Borbón, en teoría la princesa de Asturias cumple con las condiciones necesarias para ser la madrina de su hermana, pues los requisitos son que esta persona sea, primero, de religión católica, y segundo, que esté bautizada y confirmada. Nada que la hija mayor de los reyes no haya atravesado ya.
Esto podría verse como una forma de mantener alejada a Sofía de Grecia de sus nietas, no tuvo la oportunidad de ser madrina de ninguna de las dos, ni siquiera de la mayor, en cuyo caso su padre, Felipe VI se hizo cargo de tomar dicho papel, con la diferencia de que su ceremonia se celebró en medio de restricciones sanitarias, en 2021, no es el caso de la infanta Sofía, quien además se confirma con sus compañeros de cuarto de la ESO.
La reina Sofía, harta de Letizia
Letizia debe sentir un escalofrío recorriéndole la espalda cada vez que pasa frente a la habitación de la emérita, pues desde que la reina consorte pidió a la abuela de sus hijas abstenerse de visitarlas durante la hora del año, la relación no fue la misma para Sofía de Grecia y Letizia, algo se quebró, y luego con el tiempo la reina Sofía pasó más a ser una mera espectadora en su habitación que alguien que realmente interactúe con otros habitantes de Zarzuela. Letizia la alejó hasta de los menús de la cocina, es solo uno de muchos ejemplos, pero queda claro que la eventualidad de la confirmación de la infanta Sofía solo es un clavo más al ataúd de la relación de las infantas con su abuela.