Los duques de Sussex han tenido varios problemas a raíz del alejamiento que han tenido de la Familia Real Británica. Desde que expresaron que querían vivir en Estados Unidos hasta que se fueron, todo ha sido un montón de temas que, como no, han formado parte del dominio público y de los medios desde el minuto uno.
Esta misma presión por parte de muchas partes provocó que el príncipe Harry no estuviera de la mejor manera, llegando a presentar problemas para mantenerse centrado y estable en muchas ocasiones.
Fue por eso que él mismo tomó la decisión de ir con un psicólogo, decisión que también tomó gracias a los consejos de su esposa, la cual era partidaria que este fuera a un psicólogo para mejorar su estado de salud mental, la cual se vio gravemente comprometida. Esto ocurrió el año pasado unos meses después de la muerte de su abuela, la reina Isabel II.
¿Qué provocó que el príncipe tuviera que ir a un psicólogo?
El príncipe comenta que su estado no era para nada agradable. Le costaba mucho centrarse y cualquier comentario hacia su persona servían para que este se sintiera molesto, ofuscado y con montón de sentimientos negativos al respecto. Recordemos que el príncipe tuvo que soportar el trato de la Familia Real hacia su persona y hacia la de su esposa cuando habló de que quería desligarse de la Familia Real, pero no solo fue la realeza la que acusó o habló del príncipe y de su esposa, sino que también lo hizo el público inglés.
Cientos, sino miles de habitantes de Reino Unido no paraban de hablar de la “traición” por parte del hijo menor de Carlos III en aquel momento. Según muchos, querer desligarse de la Familia Real y querer ir a vivir en suelo americano ya era bastante traición de su parte. Todo esto, por obvias razones, llegaba a los oídos del príncipe, al cual no le quedaba más remedio que soportar todo eso. De hecho, cuando salía en público, más de un abucheo se llegó a escuchar.
Todo esto se concentró en una burbuja en el interior de su mente que terminó reventando. Fue entonces cuando su esposa Meghan Markle le insistió para que fuera al psicólogo, algo que el joven príncipe no había hecho nunca.
El príncipe actualmente afirma “La terapia me abrió los ojos”
“Creo que fue la mejor decisión que pude haber tomado” hablaba al respecto, ya que dice que ir a terapia ha cambiado su forma de ver las cosas y que al mismo tiempo le ha servido para volver a estar en un estado mental sano. Ahora mismo, en Estados Unidos, puede tener la libertad financiera que tanto quería y al mismo tiempo está fuera de la atención mediática que tenía en su país. De igual forma, su esposa, Meghan Markle, está mucho más tranquila al respecto de la salud de esposo y al mismo tiempo de la suya propia.