Cada vez que la familia real se reúne por un acontecimiento privado supone una nueva oportunidad para escudriñar el estado real de sus relaciones afectivas. La confirmación de la infanta Sofía no ha sido una excepción: por fin hemos podido ver quién es convocado y quién no cuando la cita no es institucional, sino puramente sentimental. Y además se ha destapado la inconformidad de la infanta hacia Paloma Rocasolano.
La infanta no puede ver como se da un trato preferencial a Paloma Rocasolano y se deja totalmente de lado a la reina Sofía, algo que sucedió el año pasado y que en esta ocasión han intentado subsanar con notable éxito. Letizia es una buena periodista y con cuentas falsas está al corriente de todo lo que se comenta en la prensa sobre ella y su familia, así como en redes sociales.
Se ha especulado en muchas ocasiones sobre la posible, a veces más que evidente, mala relación que existiría entre ambas reinas. Hay una cierta rivalidad y distancia. Letizia ha querido dejarle claro a Sofía que ahora ella es la reina y es a quien se le debe un respeto. Ella ahora es emérita y desaparece de la jerarquía.
La infanta Elena está harta de los desplantes a sus padres por parte de Letizia y así se lo ha querido dar a entender. Quiere que su padre, Juan Carlos, regrese a España siempre que quiera y se deje de enturbiar la imagen de éste y de Sofía, así como de las infantas. Como venganza, las infantas van a pasar unos días con la reina emérita demostrando unidad familiar y es probable que acompañen al padre de Felipe en su próxima visita a España.
En definitiva, no hay pruebas definitivas para afirmar que la infanta Elena no quiera a Paloma Rocasolano. Sin embargo, existen algunos indicios que podrían sugerir que la relación entre ambas no es del todo cordial.
Letizia prioriza a Paloma Rocasolano ante el resto de la familia
La reina ha querido desvincularse de toda la familia de su marido y ha priorizado a la suya propia. Es muy común verla en cualquier sitio con Paloma Rocasolano, las puertas para su madre siempre están abiertas, incluso en Palma de Mallorca donde han viajado en varias ocasiones.
Intentan calmar las aguas sin saltarse los protocolos
Para calmar los ánimos en la familia, Letizia se ha mostrado más cercana con la reina Sofía en esta última ocasión. Han mantenido una amena conversación y han estado un buen rato a su lado, también Leonor y Sofía. Quien ha quedado en un segundo y discreto lugar ha sido Paloma Rocasolano, que les ha esperado dentro del Teatro Campoamor y después ha esperado a que ellos salieran. Elena estaba muy enfadada con Letizia, con quien no se habla, pero también con la madre de ella. Ya les ha dejado las cosas muy claras. El protocolo es el protocolo, y la madre de Felipe se merece el mismo respeto, atención y cariño.