La relación entre madre e hija es una de las conexiones más sólidas que pueden existir. En el caso de Paloma Rocasolano y su hija Letizia Ortiz, esta conexión se ha mantenido firme a lo largo de los años, incluso en los momentos más difíciles. Paloma ha sido el pilar sobre el cual Letizia ha construido su vida, especialmente en su transición a la realeza española.
Desde temprana edad, Paloma observó el potencial en su hija. Letizia siempre mostró determinación y ambición en su carrera profesional. Siguiendo los pasos de su padre, incursionó en el periodismo y rápidamente destacó en TVE. Sin embargo, el destino le deparaba un camino diferente al lado de Felipe VI.
La noticia del compromiso entre Letizia y Felipe VI no fue fácil de asimilar para Paloma. A pesar de ello, mostró su apoyo incondicional a su hija en esta nueva etapa de su vida. A medida que Letizia se enfrentaba a la hostilidad de ciertos sectores de la sociedad por su origen plebeyo y su pasado como mujer divorciada con tendencias republicanas, Paloma se mantuvo a su lado, ofreciéndole fortaleza y aliento.
Tensiones matrimoniales y la intervención de Paloma Rocasolano
Incluso durante las crisis matrimoniales que han atravesado Felipe y Letizia, Rocasolano ha sido un elemento estabilizador. Cuando los rumores de divorcio amenazaban con dividir a la pareja real en 2013, Paloma intervino para proteger la unidad familiar y la institución monárquica. En aquel momento, se afirmaba que el caso Nóos con Iñaki Urdangarin encarcelado y la infanta Cristina en juicio, así como los escándalos de corrupción de Juan Carlos, y su relación con su amante Corinna Larsen, habían debilitado la corona española y desencadenado grandes tensiones entre los actuales reyes. Sin embargo, se ha revelado recientemente que esa crisis podría haber estado relacionada con las supuestas infidelidades de Letizia con Jaime del Burgo. Fue entonces cuando Paloma Rocasolano intervino para evitar que Felipe VI se divorciara de su hija.
La furia de Paloma Rocasolano: Felipe VI está en el punto de mira
Ahora, Paloma Rocasolano ha vuelto a tomar cartas en el asunto, pero esta vez sus miradas apuntan directamente a Felipe por la situación complicada que enfrenta su hija. Reconoce las faltas de Letizia en cuanto a los compromisos conyugales, pero sostiene que Felipe, lejos de mostrar comprensión, parece estar profundizando las heridas, dejándola en una posición vulnerable y expuesta al implacable escrutinio público. Para Paloma, él se ha convertido en un cómplice involuntario de aquellos que buscan desacreditar a su hija.
Además, la situación ha llevado a Paloma Rocasolano a perder la calma con su yerno, ya que el rey ha limitado sus visitas a Zarzuela. Esto ha provocado que la madre de la consorte arremeta contra Felipe por el sufrimiento que su hija está experimentando, tanto en términos de su reputación pública como de su bienestar psicológico. También destaca el impacto en el resto de la familia, dado que se sabe que Letizia está enfrentando niveles elevados de estrés y ansiedad. Para Rocasolano, el hecho de que Felipe deje a Letizia sola en situaciones de riesgo, así como el impedir que ella le brinde su apoyo y esté a su lado cuando lo necesite, es considerado como una de las formas más despiadadas de herir a su hija.