La reina Sofía ha aprovechado la caída de su nuera, Letizia, para recuperar su posición como matriarca de la Casa Real. En las últimas semanas, después de que la consorte estuviera envuelta en un escándalo de infidelidad a Felipe VI, la emérita ha vuelto a ejercer un papel más activo en Zarzuela y ha decidido dar un alto a Paloma Rocasolano y a su novio, Marcus Brandler en el Palacio.
La esposa de Juan Carlos I ha aprovechado la oportunidad de ver a Letizia perder la autoridad en Zarzuela para imponer sus propias reglas y al mismo tiempo erradicar las que la reina había establecido en los últimos meses dando prioridad a su familia y desplazando a los familiares de Felipe.
Una de las decisiones más significativas de Sofía ha sido permitir que sus hijas, las infantas Elena y Cristina, y su nieta, Victoria Federica, vuelvan a dormir en el Palacio de la Zarzuela. Recordemos que desde hace un tiempo se rumoreaba que Letizia había prohibido a sus cuñadas y a su sobrina vivir en la residencia oficial de la familia real, lo que había generado tensiones entre ellas.
Victoria Federica estaba acostumbrada a salir de fiesta y regresar a medianoche al Palacio, lo que molestó a la consorte y la llevó a tomar esta decisión, para evitar manchar la imagen de la corona que tanto le había costado mantener... hasta ahora.
Pero, además, la emérita ha decidido echar a un lado a quienes hasta hace poco tuvieron los mayores privilegios en el Palacio: Paloma Rocasolano y Marcus Blandler. A pesar de que la madre de la reina aún la visita, ya esta no se queda por mucho tiempo como solía hacer antes junto a su novio, quien ahora ni siquiera va de paso por el lugar.
La reina Sofía ha tomado estas decisiones en medio de la crisis matrimonial entre Letizia y Felipe, es por ello que su hijo le ha dado el visto bueno para todas estas acciones y ha dado orden para que se ejecuten.
Felipe y Paloma Rocasolano rompen relaciones
A pesar de que el rey y su suegra se llevaban de maravilla porque esta fue una de las pocas personas que le tendió la mano al inicio de la relación con su hija, ahora parece que la relación está completamente rota y no hay trato.
Felipe y Paloma Rocasolano pasaron de tener una relación familiar muy cercana a nada, y esto debido a las declaraciones de infidelidad por parte de Jaime del Burgo a través de su cuenta de X (antes Twitter) y los señalamientos del periodista Jaime Peñafiel en su nuevo libro ‘Letizia y yo’.
El rey no tiene deseos de saber nada de Letizia ni nada que tenga que ver con ella, ni siquiera de su madre Paloma Rocasolano, pues este considera que todo su entorno estaba consciente de lo que ocurría y decidieron ocultarlo. El soberano se ha visto fuertemente golpeado por esta situación y ha decidido buscar refugio entre su círculo de amistades.