Queda bastante claro que abandonar una casa real llena de lujos y privilegios en busca de tu propia independencia es una decisión arriesgada en la vida, pero fue lo que hicieron los duques de Sussex en 2020. El príncipe Harry y Meghan Markle decidieron mudarse a Estados Unidos lejos de la familia del príncipe, lejos de la realeza, y lejos de Carlos III, quien fue un enorme obstáculo para el matrimonio de su hijo.
Un matrimonio sólido, o eso parecía ser
El trato que recibían el príncipe Harry y su esposa dentro de la casa real iba cada vez más a peor, como comentan ellos, abandonaron todo para contar su versión de todo lo que ocurre en la casa real, revelar secretos de la familia del príncipe y alejar a sus hijos de ese ambiente que siempre ha sido tan opresivo para ellos. También influye mucho Meghan Markle en esta decisión, pues su presencia nunca fue bienvenida dentro de la familia. Todos se metían con ella, no querían que el príncipe Harry contrajera nupcias con ella, y se notó en la boda, pues excepto ellos dos, nadie sonrió ese día en la boda según se recuerda.
El que el príncipe Harry decida abandonar todo por su esposa puede ser calificado como mínimo de romántico, y quizá en su momento no lo pensó dos veces, pero el tiempo ha pasado y lo que parecía ser oro se ha convertido en una piedra cualquiera pintada de amarillo, pues las cosas no estarían bien entre los duques de Sussex.
Harry ya ha comentado él mismo en “Spare” acerca de su peor pelea con Meghan Markle, un momento difícil para ellos pero que lograron superar. Quitando eso su matrimonio parecía idílico, donde la mayor pelea ocurría porque al príncipe Harry le gustaba comer pizza sobre el sofá y lo ensuciaba, pero de un tiempo para acá las cosas habrían cambiado dentro del matrimonio para mal. Una señal podría ser la madre de Meghan Markle.
Doria Markle no saldría del domicilio de su hija
Sabemos que Meghan Markle quiere mucho a su madre. Es alguien a quien vemos aparecer ocasionalmente, pero según rumores ahora estaría prácticamente viviendo con ellos en su hogar de Montecito, California. Motivos puede haber muchos, pero se atribuye a la creciente crisis matrimonial que estarían afrontando el príncipe Harry y Meghan Markle.
Además de esto, se ha sabido de los viajes individuales del duque de Sussex, no solo aquellos donde no se le permite la asistencia a Meghan Markle, como la coronación de Carlos III o la conmemoración de la muerte de Isabel II (a la cual el príncipe Harry no asistiría), sino que además Harry ha sido visto en Japón por una gira en el continente asiático con próximo destino a Singapur sin Meghan Markle.
Puede tratarse solo de una responsabilidad personal, pero no hace más que echar leña a los rumores de que el matrimonio de los duques de Sussex está en etapa terminal. Las cosas no han ido de la mejor manera para el príncipe Harry y Meghan Markle, y de divorciarse podríamos considerarlo una victoria para Carlos III y toda la familia real, quien quizá espera el regreso del hijo menor del rey.