La reina Letizia ha logrado cautivar al mundo con su elegancia y sofisticación, pero detrás de su imagen impecable y sus acertados estilismos reales, se esconden secretos de su juventud que han sido borrados de la memoria pública. Entre las irreverencias más notables de su pasado, se encuentra su afición por el autostop, sus fotografías fumando y, por si fuera poco, el atrevimiento de hacerse un tatuaje en una zona íntima de su cuerpo. Sin embargo, cuando Felipe VI le propuso matrimonio, Letizia se vio obligada a deshacerse de ese polémico tatuaje por un decreto oficial de La Zarzuela.
La mayoría de estas anécdotas ocurrieron durante su estancia como estudiante en México. Según la periodista Pilar Eyre, experta en Casa Real, “la ahora reina, vendía tabaco en las calles de México cuando estaba allí haciendo su tesis doctoral. ¿Para qué? Como todo joven, para juntar dinero y poder irse de fiesta con amigos". De hecho, incluso llegó a casarse con Alonso Guerrero, con uno de sus profesores universitarios, aunque el matrimonio terminó en divorcio antes de que Letizia conociera al entonces príncipe de Asturias.
El autostop y el tatuaje oculto de Letizia: secretos guardados bajo llave
Pilar Eyre es una de las personas más informadas sobre la época rebelde de Letizia. Según la periodista, Letizia "aprendió a hablar catalán" cuando vivía con su hermana en Cataluña. “Letizia habla bien en catalán porque ella disfrutaba los veranos en esta comunidad autónoma mientras su hermana vivía aquí”, dijo Eyre. Y agregó: “De hecho, aprendió el idioma haciendo autostop para ir de playa en playa". Además, aseguró que la reina Letizia llevaba una “vida sexual ajetreada en algunos campings”.
Asimismo, Eyre señaló que, en la etapa más alocada en la vida de Letizia, la reina también se habría hecho un tatuaje en una zona íntima de su cuerpo. “Letizia se hizo un tatuaje en un lugar oculto”, reveló la cronista. Eso sí, no se menciona específicamente la ubicación de este tatuaje, siendo un secreto conocido únicamente por Felipe VI y por quienes han compartido intimidad con ella. Sin embargo, resulta curioso que en ninguna de sus apariciones públicas se haya podido apreciar algún rastro de dicho tatuaje.
El decreto real que lo cambió todo
Se rumorea que, antes de casarse con Felipe, Letizia recibió la "recomendación" de borrar el tatuaje a través de un decreto real, ya que podría ser perjudicial para su imagen y la reputación de la monarquía. Aunque se desconoce si Letizia cumplió con las órdenes de La Zarzuela, lo cierto es que no ha habido ninguna imagen pública que revele su existencia. ¿Logró ocultar hábilmente el tatuaje o realmente decidió eliminarlo por completo?
El pasado rebelde de Letizia contrasta con la imagen pulcra y refinada que proyecta en la actualidad. Sin embargo, este oscuro secreto tatuado en su piel demuestra que incluso los miembros de la realeza tienen un pasado oculto. Y aunque la reina Letizia ha dejado atrás su vida rebelde para convertirse en un ícono de estilo y elegancia, siempre habrá un misterio en torno al tatuaje que fue prohibido y desapareció por decreto real.