La reina Letizia ha sido criticada en ocasiones por las restricciones que impone a su hija mayor, la princesa Leonor. Estas restricciones se centran principalmente en las salidas nocturnas y en exigirles a los escoltas un informe diario sobre todo lo que hace la joven.
Presuntamente la esposa de Felipe VI quiere tener absoluto control sobre su primogénita y quiere tener conocimiento sobre todos sus pasos durante su formación en la Academia General Militar (AGM) de Zaragoza.
De hecho, a pesar de la popularidad de las fiestas en la zona universitaria de Zaragoza de los cadetes, la consorte no quiere que la princesa de Asturias asista, aunque ya la han visto por allí.
La hija de Paloma Rocasolano quiere saber si Leonor participa en fiestas o salidas del cuartel con otros cadetes, y aunque es bien sabido que los cadetes no pueden ingerir alcohol mientras siguen su formación en la Academia, Letizia también ha pedido a los escoltas que controlen si se produce algún botellón que pueda involucrar a la futura reina. Es por ello que la educación de la princesa de Asturias no será nunca como la de sus compañeros, jamás pasará por desapercibida mientras todas las miradas estén clavadas sobre ella.
Control académico de Letizia a Leonor
Académicamente parece que la reina de España tampoco está facilitando las cosas. La monarca está dejando a Leonor en evidencia con sus llamadas y peticiones constantes.
Letizia ha pedido a los escoltas de la princesa y a los responsables de la Academia informes diarios sobre el proceso de adaptación de su hija y cualquier incidente que ocurra. Presuntamente la experiodista no estaba de acuerdo en que su hija se uniera al ejército, tanto que el asunto le generó algunas discusiones con su marido hasta el punto de llegar a portazos y gritos, según lo desvelado por Pilar Eyre. Es por ese motivo que la mujer no puede evitar sentir cierta preocupación por la heredera al trono.
Según apuntan diversos medios de comunicación, la reina quiere estar al tanto de todo: quiénes son y lo que hacen los demás cadetes. Además, ha dado algunas instrucciones a los encargados de la cocina, y también ha lanzado algunas solicitudes a los altos cargos del cuartel.
Entre las solicitudes de la consorte destacan que Leonor compartirá dormitorio con el resto de los cadetes, pero dispondrá de una sala exclusiva para ella donde pueda descansar.
Letizia controla la alimentación de sus hijas
A Letizia no solo le basta con controlar la educación de sus hijas, también su dieta y hábitos alimenticios. Según diversas informaciones ha trascendido que el menú del colegio Santa María de los Rosales y de Gales se volvió más sano cuando ingresaron Leonor y Sofía. La reina lo supervisaba constantemente. Se retiraron los alimentos fritos y se apostó por platos de plancha o solo un día de pasta.
Sin embargo, la academia de Zaragoza se ha resistido. Los altos cargos militares le han dicho que no cambiarán absolutamente nada. Leonor podrá comer tortilla de patatas, torreznos de Soria o hamburguesas, entre otros.