El aspecto físico es algo que obsesiona a la reina Letizia. La esposa del rey Felipe VI cuida mucho su apariencia cuando le toca protagonizar algún evento público, ya sea como actriz principal o secundaria. Sabe que la prensa tendrá puesta en ella la mayoría de objetivos y no deja nada al azar. La consorte es muy cuidadosa con la imagen que emite.
Para lograr un aspecto perfecto, Letizia sigue una alimentación sana y saludable. En su dieta no tienen cabida los azúcares, los fritos o los procesados. Y mucho menos la comida rápida. En cambio, predominan los purés, los pescados, la fruta, las verduras, los caldos naturales… Un equipo de nutricionistas le diseña un menú ideal para sus intereses.
El aspecto físico es una de las obsesiones de la reina Letizia
Pero eso no es todo. La reina Letizia también practica deporte a menudo. Intenta no saltarse ni una de las sesiones deportivas que tiene programadas. Aquí también cuenta con un equipo de preparadores que la ayudan a lucir ese físico característico en el que se le marcan los músculos y no se le ve ni una pizca de grasa de más. Es como mejor se siente consigo misma.
Aunque nada de ello tendría sentido si no lo completara con looks estudiados hasta el más mínimo detalle. La ex de Televisión Española no deja nada al azar. Sus combinaciones están trabajadas de principio a fin. Y no usa nada que pueda generar algún comentario negativo justificado en la prensa del corazón.
Camisas blancas siempre perfectas e impolutas
Aunque entre todos sus vestidos, sus faltas, sus pantalones o sus sombreros, la reina Letizia tiene una pieza fetiche que sabe que nunca fallará. Un recurso comodín que le garantiza el éxito en sus combinaciones estilísticas. Este es la camisa blanca. La consorte las tiene de todo tipo de corte y tejido. En total guarda unas 30 en su armario. Unas camisas blancas que, además, deben estar impolutas y planchadas. Y siempre quiere las mismas. Cuando una está un poco desgastada, manda al servicio a comprar una igual.