En medio de las recientes declaraciones explosivas de Jaime del Burgo, ex marido de Telma Ortiz, se desvela un capítulo olvidado en la historia de Letizia y Felipe. Las revelaciones sugieren que el matrimonio real enfrentó una seria crisis en 2013, llevándolos al borde del divorcio. Sin embargo, las razones no eran las crisis monárquicas públicas, como el estallido del caso Nóos y los fraudes fiscales de Juan Carlos I, sino un amor secreto que Letizia estaba dispuesta a priorizar por encima de todo.
Hace unos meses, Jaime del Burgo compartió su testimonio con Jaime Peñafiel para su reciente libro, 'Letizia y yo'. Sin embargo, parece que su relato no fue completamente claro y dejó algunos aspectos sin abordar por completo. A través de sus redes sociales, sin revelar completamente sus motivaciones, el abogado rompió su silencio después de una década. El ex esposo de Telma Ortiz proporciona diversos detalles para respaldar sus afirmaciones y asegura poseer material gráfico que respaldaría la supuesta infidelidad, el cual intentaron robarle en una ocasión.
Según su relato, en la segunda etapa de su presunta relación con la reina, él y Letizia planeaban trasladarse a Nueva York y llegaron a consultar asesoría legal para llevar a cabo la separación de los reyes. Sorprendentemente, esto implicaba que Letizia tendría que alejarse de sus dos hijas, Leonor y Sofía, un sacrificio que ella estaba dispuesta a hacer para continuar su relación con del Burgo.
Las cuatro etapas de una relación escandalosa
A través de su cuenta de ‘X’ (antes Twitter), Jaime del Burgo detalla las distintas etapas de su relación con Letizia a lo largo de los años: “1) Relación amorosa, de 2002 a 2004; 2) Amigos y confidentes, de 2004 a 2010; 3) Relación amorosa, duradera y continuada, 2010 y 2011; 4) Como cuñados, de 2012 a 2016”, indicó el abogado. Y agregó: “ Es la tercera relación la que termina abruptamente después de dos años, a los pocos meses de la renuncia de Letizia como princesa de Asturias, divorcio de Felipe y el establecimiento como pareja en Nueva York, que era lo que habíamos planeado. Durante año y medio pensamos y dimos pasos adelante con el objetivo de ser libres, tratamos de la cuestión del divorcio, de las niñas, buscamos asesoramiento jurídico, miramos juntos una casa en la Florida que lindaba con Zarzuela donde vivir las etapas que estuviéramos en España, consideramos Nueva York como la mejor opción de residencia permanente”.
El giro inesperado en los planes de Letizia
Ahora bien, contrariamente a lo que se podría esperar, la posible pérdida de la custodia de sus hijas no fue el factor determinante que frenó a Letizia. Según del Burgo, las jóvenes seguirían en la casa real, siguiendo los protocolos reales. De hecho, la revelación más sorprendente es que Letizia ya estaba planeando ser madre por vientre subrogado, mostrando un deseo de maternidad que se contrapone a su disposición previa a renunciar a la custodia de Leonor y Sofía. No obstante, lo que marcó un giro en los planes fue la abdicación de Juan Carlos I, abriendo la puerta para que Felipe y Letizia se convirtieran en los nuevos reyes de España. Este evento crucial alteró los planes de la pareja, evidenciando la ambición de Letizia por ser la mujer más importante del país.