No es que sea precisamente ningún secreto que, por mucho que la familia real española sea una familia muy diferente a la del resto de familias que conforman la sociedad española, hay ciertos problemas que acaban siendo los mismos tanto en todas las casas de nuestro país como en la Zarzuela.
Un buen ejemplo de ello es la relación actual que mantienen Leonor y Letizia, la princesa y la reina, una relación muy diferente a la que mantenían hace ya unos cuantos años, cuando la hija mayor de los Reyes era una preadolescente.
En este sentido, es de sobras conocido que Letizia siempre se ha caracterizado por ser una madre muy entregada a la educación de sus hijas, hasta el punto que han sido muchos los que la han criticado por ser demasiado protectora y estar demasiado pendiente de todos y cada uno de los pasos que rodeaban al crecimiento de sus hijas Leonor y Sofía.
Leonor ya no es una niña, y eso provoca tensiones con su madre
Eso sí, los días en los que Leonor obedecía sin ningún tipo de reproche todas y cada una de las órdenes de su madre y han quedado atrás, entre otras cosas porque la princesa ya es mayor de edad y, además, hace ya unos cuantos años que no convive día a día con sus padres.
El paso más importante seguramente fue su marcha al internado de Gales, dos años en los que Leonor se tuvo que espabilar en este sentido y, como no podía ser de otra forma, su carácter cambió, convirtiéndose en una persona mucho más autónoma e independiente, algo que nunca ha gustado a su madre, la reina Letizia.
Y por otro lado, el hecho de que ella sea mayor de edad y que esté tomando sus propias decisiones es algo que cada vez gusta menos a su madre, entre otras cosas porque Letizia ve como todo el poder que tenía sobre su hija, incluso también sobre la hija pequeña, Sofía, se ha desvanecido en apenas unos años, y ahora no tiene a nadie a quien atar en corto.