La princesa Leonor está navegando por la Academia Militar de Zaragoza con un viento de privilegios a favor. Sus resultados no importan, sus errores se pasan por alto, y hasta tiene el lujo de completar un año de formación sin romperse la cabeza. En otras palabras, Leonor parece tener la corona y la comodidad a su disposición.
El pasado 17 de agosto, la princesa Leonor entró en la Academia Militar de Zaragoza, donde empezó su formación en el ejército. Un adoctrinamiento que tiene una duración total de tres años, y en la que al terminar habrá pasado por los ejércitos de tierra, mar y aire. Sin embargo, parece que las cosas no le están yendo tan bien como nos quieren hacer creer.
Los privilegios de la princesa Leonor en la Academia Militar
A pesar de los esfuerzos de los reyes Felipe VI y Letizia por igualar el trato de Leonor con el resto de los cadetes, hay algo llamado "régimen propio y diferenciado" que le da a la princesa ciertos privilegios. Gracias a ello, los resultados de Leonor no importan en absoluto. Suspensos en pruebas físicas, bajas puntuaciones en maniobras…, no hay problema. La princesa pasa de curso sin miramientos gracias a su "condición especial". La futura reina tiene un pase libre para ascender automáticamente y ser la primera de su promoción.
Algunos cadetes, en círculos secretos, murmuran que Leonor ni siquiera llega al mínimo exigido en las pruebas físicas. Un asunto del que no pueden hablar abiertamente porque ello puede traer consecuencias nefastas para ellos. Leonor es intocable y hablar mal de ella podría arruinarles la vida. Sin embargo, entre susurros y miradas cómplices, algunos valientes sacan el tema a flote.
Otras ventajas de ser la futura reina de España
Pero eso no es todo. Resulta que Leonor ha disfrutado de otros privilegios. Por ejemplo, fue la primera en jurar la bandera el 7 de octubre. Un gesto reservado al mejor alumno del primer año de la Academia. Queda claro que ser la futura reina tiene sus beneficios.
Y mientras sus colegas se parten el lomo durante cuatro años de formación militar, Leonor solo tiene que preocuparse por tres. Completó el primero automáticamente en cuanto juró la bandera gracias a esa “condición especial”.