No es una novedad que las cosas están tensas en Zarzuela. Desde hace meses que el palacio real se ha sentido más vacío, por un lado es normal ya que tanto Leonor como Sofía de Borbón están fuera por sus estudios en Zaragoza y Gales respectivamente, pero también porque Felipe VI evita el palacio todo lo que puede. Sus problemas con Letizia se están volviendo tan inabarcables que Zarzuela no es suficiente para tenerlos a los dos. Es por eso que el rey ha estado saliendo en exceso con amigos y aprovechando para pasar la noche en sus casas, por lo que quienes están en Zarzuela son principalmente Letizia y ocasionalmente su madre, que se preocupa por ella.
Sin embargo, Felipe VI no es el único que se ha dedicado a evitar a Letizia, sino que su hija mayor también ha estado mostrando comportamientos cada vez más rebeldes con su madre, aunque de cierto modo no debería ser novedad para Letizia pues a fin de cuentas es su hija. En principio la relación de Letizia y sus hijas no es mala, pero ha empeorado con el paso del tiempo ya que la consorte siempre ha tenido una actitud autoritaria hacia todos, incluyendo evidentemente a sus hijas.
Leonor le planta cara a su madre, no la perdona por lo de Jaime del Burgo
Aunque algunos ya sabían lo que había pasado entre Letizia y Jaime del Burgo, las hijas de los reyes eran ignorantes de este affaire. Es por ello que cuando se enteraron su reacción fue bastante notoria, una vez más es Leonor de Borbón la que peor se ha tomado todo y se ha mezclado con los problemas que ya se iban acumulando entre madre e hija.
Letizia siempre ha administrado todo de sus hijas, la forma en que visten, sus comidas y sus comportamientos. Hizo aprender a usar tacones a Leonor y en general otros comportamientos que le han ganado fama de controladora, algo de lo cual sus hijas se han cansado con el tiempo y es la princesa Leonor quien ha reaccionado primero, desobedeciendo a su madre e incluso la rechaza y le echa en cara lo que le hizo a su padre con Jaime del Burgo, algo que hasta el momento no le ha perdonado y no ha hecho más que aumentar progresivamente la brecha entre las dos.
Madre e hija están peleadas, cada vez más del lado del padre
Leonor de Borbón consideraría que su padre no es nada más que una víctima de los comportamientos y el ego de su madre, por lo que la princesa de Asturias está indudablemente polarizada hacia Felipe VI. Su relación nunca ha sido mala pero ahora que ha sucedido lo de Jaime del Burgo la hija del rey estaría mucho más dispuesta a defender a su padre que a su madre, algo que a pesar de que la corona se mantenga deja bastante en riesgo cualquier posición que Leonor de Borbón pudiese permitir a Letizia mantener en el futuro.