El mundo nunca dejó de observar con asombro la tumultuosa relación entre Lady Di y Carlos III, dos figuras emblemáticas de la realeza británica. A pesar de la fachada de cuento de hadas que se tejió en torno a su unión, los susurros de traición y desencanto siempre estuvieron presentes. Diana, la joven ingenua y profundamente enamorada, se encontró con una revelación impactante poco antes de su boda: su prometido, el príncipe Carlos, aún estaba enamorado de su ex novia, Camilla Parker Bowles. Su unión, pronto se convirtió en un torbellino de desconfianza y desamor. Pero, ¿qué tan inocente era Diana en toda esta trama? ¿Acaso la ‘princesa del pueblo’ escondió sus propias infidelidades para construir una narrativa a su favor? Las recientes revelaciones apuntan hacia una respuesta sorprendente.
En las primeras etapas de su matrimonio, el príncipe Carlos y la princesa Diana representaban el futuro de la monarquía británica. Pero con el tiempo, la relación empezó a deteriorarse. Diana, abrumada por las desilusiones de su esposo, cayó en una profunda depresión y luchó contra trastornos alimenticios. Gritaba pidiendo ayuda en los pasillos del Palacio, pero su voz parecía perderse en el viento. Finalmente, los líos de cama del entonces príncipe de Gales salieron a la luz.
El escándalo de infidelidades al descubierto
Una vez que el matrimonio colapsó, la princesa Diana no perdió tiempo en arrojar sombras sobre la figura de Camilla Parker Bowles, a quien señaló públicamente como la culpable de la disolución de su matrimonio. Fue en una polémica entrevista en 1995 cuando Lady Di pronunció las palabras que aún resuenan en la memoria de los británicos: "Éramos tres en este matrimonio, así que estaba un poco abarrotado”. La princesa Diana también confesó haber buscado consuelo en los brazos de James Hewitt, un oficial de caballería del Ejército Británico, en respuesta a las infidelidades de su esposo. Al menos, eso es lo que todos creímos durante décadas.
Revelaciones que cuestionan la narrativa convencional
Recientemente, el testimonio de Allan Peters, quien una vez fuera miembro de la seguridad de la fallecida princesa, ha arrojado dudas sobre la narrativa convencional. Según Peters, Diana fue la primera en traicionar a su esposo. Alega que Carlos III solo volvió a involucrarse con Camilla Parker Bowles después de descubrir la infidelidad de Diana con Barry Mannakee, un hombre casado y miembro de la Casa Real británica. ""La idea popular es que el Príncipe de Gales tuvo una relación con Camilla durante todo el matrimonio con Diana, y eso no fue así, es una información equivocada. La primera persona que se desvió del camino fue la princesa. El Príncipe Carlos no volvió a ver a Camilla hasta después de enterarse del romance de Diana con Mannakee ", afirmó Peters en un documental de la CNN.
La propia Lady Di habló de este romance en una entrevista posterior a su divorcio: "Cuando tenía 24 o 25 años, me enamoré profundamente de alguien que trabajaba en este ambiente. Pero le echaron y luego él fue asesinado. No me es fácil hablar de esto", confesó Diana a los medios. Sin embargo, pasó desapercibido para muchos que este romance ocurrió en 1985, cuando Diana y Carlos llevaban apenas cuatro años de casados. Este detalle podría respaldar la idea de que Lady Di fue la primera en ser infiel en su atribulada relación.