Juan Carlos I volverá a España, es inevitable y Letizia no puede hacer nada al respecto pese a que no quiera que su suegro regrese al país. Sin embargo, en esta ocasión el rey emérito regresa a España por tres razones. La primera, como se podrán imaginar, es el cumpleaños de la princesa Leonor, ya que el 31 de octubre cumplirá sus 18 años. Será una fecha importante para ella, pero también para todo el panorama real. La segunda razón por la que el emérito estará en el país tiene que ver con el juramento de la princesa ante la Constitución, algo que en su momento también hizo Felipe VI. Juan Carlos I quiere estar presente para estos dos importantes eventos, pero también necesita estar presente para algo más.
El divorcio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin podría llevarse a cabo el mismo día que el cumpleaños de Leonor
La tercera razón que hace que el emérito tenga que hacer un viaje a España el 31 de octubre es el divorcio de su hija, la infanta Cristina. Es probable que tal divorcio termine de llevarse a cabo a fin de mes, y se ha escogido esta fecha para no levantar sospechas. Nadie pensaría que Juan Carlos I vendría al país para estar presente en el divorcio de su hija cuando su nieta está de cumpleaños, por lo que se quiere aprovechar lo movido que será tal día para la familia real para despistar al público y a los medios.
Como es lógico pensar, Felipe VI y Letizia están conscientes de esto, pero no pueden hacer nada para que la fecha del divorcio se aplace, pues teóricamente, es el mejor día para llevar a cabo la firma del divorcio de la hermana del rey por lo ya comentado. Tener una pantalla de humo como lo será el cumpleaños de Leonor es lo mejor para que nadie sepa que hay algo más llevándose a cabo.
Se presume que el modus operandi será el siguiente: Juan Carlos I estará en el juramento de la princesa y luego de eso se dirigirá con total secreto a dónde los abogados de Iñaki Urdangarin para poder llevar todo a cabo. Obviamente esto sería realizado antes de la celebración por el cumpleaños de la hija mayor de los reyes, pero dado que juramento y fiesta se realizan el mismo día, todo el mundo estará muy ocupado como para vigilar otras cosas.
Día de celebración para la familia real, día triste para la infanta Cristina
Si el 31 de octubre se lleva a cabo el divorcio de la infanta, está más que claro que la pasará mal al estar en la fiesta de Leonor, ya que, recordemos, toda la familia tiene que estar para tal celebración. Estará el emérito y su esposa, de la misma forma que estarán las hermanas del rey. Sin embargo, por ahora solo queda esperar la tan ansiada fecha y ver cómo sucede todo.