Abril de 2023 fue un mes mediático para la casa real, como cualquier otro, pero a su vez involucraba el regreso de alguien que para Letizia es una persona non-grata. Bajo esa descripción podríamos meter a casi toda la realeza en el saco, pero para evitar confusiones, se hace referencia a Juan Carlos I, el emérito que desde 2020 reside en Abu Dabi, pero que hizo mucho ruido con relación a sus intenciones de volver a España, especialmente durante épocas de campaña electoral.
Si Zarzuela no dejaba volver a Juan Carlos I, él se encargaría de que se lo permitieran
El emérito tiene un buen grupo de amigos poderosos dentro y fuera de España, todos a su disposición y notablemente entusiastas cuando se trata de ayudar al padre de Felipe VI, y eso es lo que ha pasado precisamente y habría permitido o como mínimo facilitado el regreso de Juan Carlos I durante abril de 2023. Una editorial a cargo de Fernando Ónega, amigo del padre de Felipe VI, habría recibido una foto de parte del entorno cercano al emérito, la orden era difundirla, y la foto en cuestión eran Juan Carlos I junto a dos personas más, la infanta Elena y Froilán, su hija y nieto respectivamente, este último llevado a Abu Dabi a modo de reformatorio para intentar controlar sus actitudes polémicas, aún se le recuerda como protagonista de aquella pelea de cuchillos que colmó la paciencia de la casa real, y ahora trabaja para una de las petroleras más importantes del mundo.
Lo importante, es que la foto en sí resultaba comprometedora para Zarzuela, así que la amenaza era que vendrían más luego de esa en caso de no satisfacer las demandas del emérito. La solución era “fácil”, dejarlo volver a España, nada detendría al emérito de reencontrarse con su “Bribón” en las regatas de Sanxenxo.
Según informó Confidencial Digital basándose en fuentes cercanas a Juan Carlos, la foto se había filtrado a modo de ayuda al emérito para “reivindicar su figura”, la cual lleva años “ninguneada”. Por el mismo motivo, algunos incluso aseguraban que el rey emérito se estaba escondiendo, pero finalmente, se dejó clara la intencionalidad exacta de esa foto y el por qué Froilán y la infanta Elena, la finalidad era reabrir el debate referente a si Juan Carlos I debería regresar o no a España.
Según otras fuentes, Juan Carlos I puede volver cuando quiera
La versión de una fuente cercana a la realeza indica un panorama distinto, eso sí, asegura que de ser necesario, Juan Carlos I podría residenciarse en España de así quererlo, pero el problema está para él en que le conviene permanecer fuera del país por la cantidad de impuestos que tendría que pagar. Además, la gestión de su testamento también se le facilitaría enormemente tanto a él como a sus herederos, pues se ahorra tener que declarar sus estimados 2.000 millones de euros en España.