Tan solo hace falta ver algunas de las muchísimas noticias relacionadas con Juan Carlos I que han salido en los medios de comunicación en los últimos años para darse cuenta de que ha sido uno de los nombres que más ha dañado la imagen de la casa real española en los últimos tiempos.
Eso sí, que el emérito haya sido el que más dolores de cabeza ha provocado en la Zarzuela no quiere decir que el nombre de Iñaki Urdangarin sea precisamente un hombre que inspire tranquilidad a la casa real, entre otras cosas porque él ya exmarido de la infanta Cristina fue uno de los primeros que provocó una serie de terremotos en Zarzuela de los que muchos aún no se han recuperado.
Juan Carlos I nunca se fio de Iñaki Urdangarin
Pero lo curioso en este caso es que, ahora que han pasado ya unos años, se empieza a conocer la verdad de la relación entre Iñaki Urdangarin y el que fue sus obras durante muchos años, Juan Carlos I. Si bien es cierto que siempre se había vendido la imagen de que Iñaki era un hombre muy cercano Juan Carlos I y que el entonces rey tenía a su yerno es muy alta consideración, lo cierto es que la realidad fue muy diferente.
Es más, parece ser que fue el propio emérito el que intentó torpedear la relación de su hija con él entonces jugador de balonmano, entre otras cosas porque sabía muy bien que Iñaki era ya entonces conocido por sus dotes de ‘don Juan’, y no quería que su hija se casara con un hombre poco dado a la fidelidad, seguramente porque conocía en primera persona las consecuencias que este tipo de comportamientos acaban provocando en un matrimonio.
Pero Cristina, locamente enamorada de Iñaki, no quiso escuchar las advertencias de su padre, que le llegó a decir que sabía muy bien que Urdangarin había estado involucrado en varias relaciones mientras empezaba su relación con Cristina. El tiempo ha acabado dando la razón a un emérito que, eso sí, tampoco es que sea una figura ejemplar en este sentido.