Juan Carlos I se ha convertido en uno de los nombres que más polémicas y más dolores de cabeza han provocado en los últimos tiempos en la Zarzuela. De hecho, tantas eran las noticias negativas que aparecía en los medios que desde la institución, con la intención de alejar a la actual monarquía, la de Felipe VI y Letizia, de la anterior, decidieron invitar al emérito a que se marchara lejos de España y fijara su residencia en Abu Dabi.
El emérito no tuvo otro remedio que aceptar, aunque ya han sido varias las veces que ha regresado a España o ha coincidido con su familia en algún acto. Un buen ejemplo de ello fue en el acto de graduación de su nieta Irene Urdangarin, la hija pequeña de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin.
Un acto en Ginebra al que no acudieron ni los actuales reyes ni sus hijas pero al que sí que acudió el emérito, que de hecho coincidió con su aún yerno, Iñaki, al que hacía mas de 5 años que no veía.
Juan, el hijo de Iñaki Urdangarin, le deja las cosas claras a su abuelo
Parece ser que fue en este encuentro familiar en el que el emérito le habría reprendido a Iñaki Urdangarin el hecho de que decidiera empezar una nueva vida sentimental con Ainhoa Armentia antes de haber acabado oficialmente su relación con la infanta Cristina. Parece ser que aJuan Carlos I le sentó muy mal ver las fotos de su yerno siendo infiel a su hija.
Lo curioso en este caso es que, si bien Iñaki optó por no hacer precisamente mucho caso a su aún suegro en este tema, no fue otro que su hijo mayor, Juan, que nunca se ha caracterizado por ser una persona que se calle ciertas cosas, el que le dejó muy claro a su abuelo que no era él precisamente un ejemplo en estos temas y que no tenía ningún tipo de derecho, y más conociendo la vida sentimental de Juan Carlos más allá de la reina Sofía, de recriminarle nada a su padre.
La conversación no fue más allá, pero no deja de ser una muestra más de cómo ciertas actitudes del emérito siguen generando tensión en la familia de la infanta Cristina.