“En este mundo, una divorciada es menos que nada”, es lo que le decía Juan Carlos I a su médico cuando fue a realizarse un tratamiento rejuvenecedor, por allá por el año 2007, momento que fue sucedido por el anuncio del “cese de convivencia” de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, su matrimonio fue muchas cosas, y muy longevo, permanecieron juntos durante 12 años y tuvieron dos hijos, pero pareciese que todo les salió por la culata, a día de hoy es más lo mal que se habla de Froilán y Victoria Federica, que lo bueno que se sabe de ellos, y los 12 años de matrimonio fueron más una condena de prisión para la infanta Elena que otra cosa, Jaime de Marichalar tampoco la pasó bien, ni durante ni después del matrimonio.
Juan Carlos I habría causado que la infanta Elena se mantuviera con Jaime de Marichalar durante más de una década
El “cese de convivencia” no fue causado por algo reciente, véase reciente, como algo que haya ocurrido en el año 2007, sino que la infanta Elena y Jaime de Marichalar ya llevaban un buen tiempo con dificultades, el punto de inflexión del matrimonio fue sin duda el ictus que sufrió Jaime de Marichalar, el cual transformó su actitud, el que se presentó a la familia real como alguien extremadamente educado, ceremonioso, quizá demasiado, y con un notable hambre del prestigio de la realeza, se había convertido en una persona malhumorada y de poca paciencia.
Esta información viene de parte de la ya conocida Pilar Eyre en su concurrente espacio en Lecturas, donde se dedicó a hablar del sonado divorcio de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, en una especie de conmemoración a los 15 años de este suceso, pues su texto fue publicado en noviembre de 2022.
Continuando con la historia de Juan Carlos I y su doctor, cuando el rey emérito le contó a este de la situación, el doctor, con bastante sentido común, le responde que el divorcio sería la mejor opción, a lo que Juan Carlos I le respondió con notable indignación “que se aguante y se joda como hemos hecho todos”, el padre de Felipe VI era consciente de lo mal que se llevaban su hija y Jaime de Marichalar, pero le comentaba a su médico que de haberse divorciado en ese momento, le habría dado una muy mala imagen a la casa real, por lo que le pidió, casi exigió, que permaneciera atada a Jaime de Marichalar un poco más.
Desde una boda tensa, la infanta Elena sufrió una vida de casada que no merecía
De esta forma, la hermana de Felipe VI y la infanta Cristina no tiene una imagen tan polémica como otros miembros de la familia real, a pesar de esto, fue igualmente exiliada de la casa real y desapareció de las actividades reales, según Pilar Eyre le comentaron que Juan Carlos I dice en confianza que “Elena es la mejor de todos nosotros”, a lo que la periodista opina: “quizá sea cierto”.