Desde el año 2020 que Juan Carlos I no reside en España. El rey emérito fue “exiliado” a Abu Dabi, donde se mantiene residenciado hasta día de hoy, sin embargo se ha presentado en España algunas veces desde entonces, viajes que siempre resultan problemáticos para la casa real, pues presuntamente se le pidió que, en caso de venir, como mínimo sea discreto.
Al emérito le conviene permanecer fuera de España, la razón no es difícil de entender
Están claras de sobra las tensiones que generaba la presencia de Juan Carlos I en España, el dudoso origen de sus ingresos así como el rechazo de parte de Felipe VI de la herencia de su padre, pues considera que dicho dinero va en contra de lo legalmente establecido, a pesar de esto es el único que se niega a recibir dicha herencia pues sus hermanas aún recibirán el dinero del emérito como herencia. Por esta misma causa se hablaba de un necesario regreso de Juan Carlos I a España para hacer papeleo y dejar su testamento listo, además de participar en las regatas de Sanxenxo, movimiento que lo puso en el ojo mediático una vez más pues, resulta difícil que el emérito viaje a España sin que todo el país se entere, y esto puede y le trae problemas a la casa real.
Generalmente se ve a Juan Carlos I exiliado de España, Letizia con mucho peso en esta decisión, pero la versión de una fuente de la casa real brindada a Informalia, especifica que en realidad el emérito no tiene restricción alguna para volver al país, y no solo eso, sino que de ser su deseo, podría residir nuevamente en él, algo totalmente inverso a la imagen que se ha dado durante los pasados años, como Juan Carlos I intentando portarse bien al acoger a su nieto Froilán, y luego pidiendo algún tipo de gesto hacia él como recompensa, dejándole volver a España.
Sea cierto lo que asegura esta fuente o no, la verdad es que a Juan Carlos I no le favorece volver a España durante mucho tiempo, y es que inevitablemente conservará más de su patrimonio en Abu Dabi que en España a causa de la enorme diferencia en el sistema tributario, de estar en España tendría que rendir cuentas a Hacienda sin rechistar, mientras que en Abu Dabi puede campar a sus anchas, y eso no solo le beneficia a él, sino a sus herederos.
Mantenerse por fuera de España ayuda a mantener la privacidad de su testamento
La fortuna de Juan Carlos I es incierta, pero se calcula que ronda los 2.000 millones de euros, casi nada, y la repartición de tal cantidad de dinero puede resultar muy mediática, por lo cual, manteniéndose en Abu Dabi puede gestionar de mucha mejor manera su testamento y cuánto recibirá cada heredero, manteniendo las filtraciones y los medios al margen, y ahorrando una buena cantidad de problemas (y dinero) a sus herederos.