La figura de Victoria Federica, hija de la infanta Elena y Jaime de Marichalar, está generando preocupación en Zarzuela. Más concretamente, la insistencia de Marichalar en promover la carrera de su hija. Considerándose una de las influencers más importantes, su actitud no agrada a la Corona, especialmente a los reyes Felipe y Letizia, quienes ven con desaprobación sus comportamientos públicos.
Vic ha asumido un papel destacado tras la partida de su hermano Froilán a Abu Dabi, convirtiéndose en el centro de atención debido a sus juergas desenfrenadas, incluso involucrando a su prima Irene Urdangarin, lo que ha creado tensiones entre la infantaCristina y la infanta Elena.
Victoria Federica (y Jaime de Marichalar) pone de los nervios a Zarzuela
La presencia constante de Victoria en eventos de moda y su participación en programas de televisión como "El desafío" no han pasado desapercibidos en Zarzuela. Pero lo que más preocupa es su actitud hacia la prensa, especialmente hacia la reina Letizia, algo que su padre, Jaime de Marichalar, parece ignorar mientras intenta impulsar la carrera de su hija en el mundo de la moda. Se ha convertido en un dolor de cabeza al nivel de Jaime del Burgo.
Marichalar, consejero de LVMH, utiliza su influencia en el sector para promocionar a Victoria, colocándola en eventos importantes. Sin embargo, sus esfuerzos no están dando muchos frutos, ya que su número de seguidores en Instagram es modesto en comparación con otros influencers, llegando solo a los 271.000.
Expertos en redes sociales, como Marc Florensa, señalan que Victoria es rechazada por otros influencers debido a su percepción como una intrusa en el mundo de la moda. Se le critica por ser considerada una "parásito del sector", ya que no ha trabajado para ganarse su posición como otros influencers, como Jessica Goicoechea, quien ha desarrollado su carrera a través de campañas y empresas propias. “A Vic Fede nos la han metido con calzador. Otros influencers que si se han trabajado llegar donde están, como Jessica Goicoechea, por ejemplo, que ha trabajado muchísimo en campañas, ha hecho sus propias empresas… no quieren contribuir a la proliferación de estos perfiles. Relacionarse con un perfil que tiene más repercusión que ella para ser llamada influencer, cuando realmente solo tiene un apellido, pues… Eso hace que no quieran relacionarse con ella”, señaló el experto.