Diciembre ha sido el mes de los escándalos indiscutibles para la realeza, los reyes Felipe VI y Letizia no han tenido descanso y conforme avanzaba el mes la situación no ha hecho más que empeorar para ellos, todo a causa de las inesperadas declaraciones de Jaime del Burgo de hace algunas semanas, en las cuales el escritor afirmaba haber tenido una relación amorosa con la reina consorte Letizia durante los años 2010 y 2011 cuando esta estaba ya casada con Felipe VI.
El escándalo no se hizo esperar y Casa Real buscó de todas maneras que la noticia no se divulgara más, pero las proporciones de la controversia superaron incluso a Jaime del Burgo, quien terminó eliminando todas sus publicaciones con relación a la bomba que había soltado horas antes de borrarlos. Como es de esperar todos los medios se hicieron eco de la noticia y aunque en España tardó más en esparcirse no había nada que hacer cuando llegó al resto del mundo. Se convirtió en un escándalo de categoría internacional, del cual Zarzuela nunca afirmó ni desmintió nada, se apegan desesperadamente al silencio de cara al público aunque se sabe que internamente están bastante afectados con la filtración.
Uno de los peores diciembre para la familia real, Jaime del Burgo les hizo daño crítico
No hay duda en que si lo que Jaime del Burgo quería causar era daño lo ha conseguido de sobra. Antes de que se conociera de esta manera lo suyo con Letizia, el foco del público y los medios estaba en un lugar completamente distinto, aún con relación a la realeza solo que la incertidumbre estaba concentrada en otras cosas, principalmente en el cumpleaños de la infanta Elena que se celebró el 20 de diciembre, además de las celebraciones navideñas de la familia real, donde muchas asistencias estaban en veremos. Se desconocía lo que podría llegar a pasar en Zarzuela, y aunque siguió generando interés no se compara remotamente con la atención que logró generar Jaime del Burgo.
Para muchos lo que ha hecho Letizia no tiene nombre, aún más después de saber cómo se ha comportado durante los últimos años, siempre exigiendo de todo a su esposo, y entre estas cosas exigía absoluta fidelidad, algo que ella en respuesta no le ha entregado, no solo por Jaime del Burgo sino por otras posibles relaciones potenciales de las que no se tiene tanta información, pero hay hombres que están bajo sospecha de haberse encontrado con la consorte con las mismas intenciones que mantenía con Jaime del Burgo, aún cuando este se había casado con Telma Ortiz, lo que también creó un absoluto escándalo y discordia entre las hermanas, quienes ya no pueden ni verse y con razón.
Todo diciembre se ha caracterizado por tener un ambiente incómodo entre la consorte y su hermana. Esta última no está muy contenta con lo que le hizo la reina consorte, y aunque Paloma Rocasolano intenta que hagan las paces, el objetivo se muestra bastante difícil.