Casa Real

Irene Urdangarin sale por la puerta de atrás del hotel de Suiza, no cumple

La hija de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina se enfrenta al mundo profesional

Miércoles, 23 de agosto de 2023. 12:55
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Irene Urdangarín ya es mayor de edad

Los que conocen bien a la hija pequeña de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin,Irene Urdangarin, saben muy bien que fue hace ya un tiempo cuando Irene decidió que su futuro profesional pasaba por la hostelería, en concreto por la gestión de hoteles.

En este sentido, no es que sea precisamente ningún secreto que este año empezará su formación en ni más ni menos que la École Hôtelière de Lausanne, la universidad más prestigiosa de este seductor a nivel mundial.

Consciente de la dificultad que tendría la hora de acceder a esta universidad, por mucho que sea miembro de una pasada real, Irene se preparó a conciencia todas y cada una de las pruebas a las que sabía que se iba a someter. Eso sí, lo que me sorprendió es que, sin saberlo, necesitaba demostrar que había tenido algún tipo de experiencia práctica en el sector para poder entrar.

Las prácticas que no han gustado a Irene Urdangarin y que ponen en duda su futuro

Como no podía ser de otra forma, sus padres le ayudaron a buscar unas prácticas, en este caso en un hotel en Ginebra, Suiza. Unas prácticas en las que, si bien es cierto que Irene aprendió mucho, también entendió que es un sector en el que se trabaja muy duro, especialmente en todo lo que se refiere al día a día de los hoteles.

Irene Urdangarín
Irene Urdangarín

Por otro lado, cabe tener en cuenta que desde la propia universidad ya avisaron que, por mucho que la idea sea formar a futuros directores de hoteles y altos cargos del sector, al final todos los alumnos deberán realizar diferentes tipos de prácticas, entre ellas las de realizar el trabajo de una limpiadora de un hotel, es decir, el de hacer camas y limpiar habitaciones.

Y es ahí donde Irene, que por mucho que sea una chica muy estudiante y muy trabajadora, no se encontró del todo cómoda en sus prácticas. Falta saber ahora hasta qué punto Irene tiene la capacidad de entender que, más allá de estas duras prácticas que tendrá que llevar a cabo durante la universidad, es muy probable que no tenga que volver a hacer algo parecido al resto de su vida.