El 2023 prometía ser un año muy especial para la pequeña de los Urdangarin, Irene. Su plan pasaba por ingresar a la famosa École hôtelière de Lausanne en Suiza, una institución de renombre mundial en gastronomía y hostelería. Pero los planes de Irene tomaron un giro inesperado antes de dar comienzo.
La revista ¡HOLA! fue la encargada de soltar la bomba. Al parecer, Irene decidió darse un respiro antes de la universidad y decidió tomarse un "año sabático". Según la revista, quería seguir los pasos de su hermano Juan y sumergirse en el mundo del voluntariado mientras reflexionaba sobre su futuro. Sin embargo, a día de hoy ni cooperaciones ni reflexiones se han visto por el momento.
Irene Urdangarin superó Bachillerato con ayuda extra
Resulta que Irene ha estado pasando por momentos complicados últimamente. Las tensiones familiares, el escándalo del caso Nóos, la infidelidad de su padre Iñaki Urdangarin y el divorcio de sus padres la han dejado algo afectada.
Ello ha desembocado en que los estudios no han sido precisamente su fuerte en los últimos tiempos. Durante su último año de Bachillerato en Ginebra, la cosa se complicó. La crisis entre sus padres pesó como una losa. Incluso recibió ayudas extra para aprobar en forma de redondeo de notas que más de uno quisiera tener en su vida estudiantil. Suele pasar en colegios privados de élite.
La autoescuela también está siendo un fracaso
Asimismo, los requisitos mínimos para entrar a la escuela de hostelería en Lausanne también le jugaron una mala pasada. Se le olvidaron las prácticas obligatorias. Irene tuvo que tirar de los contactos de sus padres para sacarse de la manga unas prácticas de última hora.
Ahora Irene se está sacando el carnet de conducir. Algo en lo que lleva enfrascada cuatro meses pero sigue sin sacar adelante. A día de hoy, ni permiso de conducir ni viajes de cooperación. Una nini muy en la línea de lo que han sido durante años Victoria Federica y Froilán.