Las relaciones familiares entre los Borbón están cada vez más rotas conforme pasa el tiempo, aunque esto ha sido gracias a la rigurosa labor de Letizia todos estos años. Su enfoque ha ido a fragmentar totalmente la Zarzuela, dejando un hogar solo para ella, sus hijas y Felipe VI, también viven allí la emérita Sofía y su hermana Irene de Grecia, que un poco más y también terminan en la calle.
Quienes se han visto totalmente distanciados entre ellos han sido los hijos de los reyes y las infantas Cristina y Elena. Tanto Sofía como Leonor de Borbón no se llevan ni con los Urdangarin ni los de Marichalar, ya que no hay relación, y en algunos casos, como el de la princesa de Asturias con Froilán y Victoria Federica, directamente no se aguantan. De Sofía de Borbón sabemos menos pero son tres cuartos de lo mismo, la relación entre primos es nula, así como lo es con dos de sus abuelos. La infanta Sofía no se lleva en absoluto con el padre de Felipe VI, ni con el de la reina consorte.
Una nula relación ocasionada por las malas relaciones de Letizia
Como ocurre con otros casos, el que la infanta Sofía no se relacione con sus abuelos no viene directamente de una decisión o preferencia suya, sino más algo impuesto por su madre, quien sí se lleva mal con estos dos hombres. El caso de Juan Carlos I es más que conocido mediáticamente, pues el emérito no tragó a Letizia desde el primer momento en el que se encontraron. Su enemistad ha sido legendaria en la historia de la realeza española pese a que se ha intentado hacer parecer lo contrario, y ya sabemos que Letizia se agenció el exilio del emérito en 2020, cuando este tuvo que partir a Abu Dabi. Sin embargo, su regreso este año parece de momento inevitable, cosa por la cual la reina consorte estará muy disgustada, aunque no cambiará nada en sus planes. En el mismo país o no, Letizia no permitirá que sus hijas hagan algún tipo de relación con su abuelo por parte de Felipe VI.
El caso que resulta aún más curioso es el de Jesús Ortiz, el padre de Letizia que, como ya mencionamos, tampoco tienen ningún tipo de relación con Sofía de Borbón, muy contrastable con la madre de la reina consorte, Paloma Rocasolano, quien se encargó personalmente de la crianza de sus nietas a pesar de tener que lidiar con su propio trabajo, algo que de paso llenó de celos a Sofía de Grecia, quien quedó totalmente alejada de sus nietas desde entonces.
Pero volviendo al padre de Letizia, el motivo del descontento de la reina consorte se debe a que su padre, luego de separarse de Paloma Rocasolano, tomó la decisión de rehacer su vida y casarse nuevamente, una decisión que a su hija no le gustó en absoluto. Tampoco le caía bien Ana Togores, la esposa de su padre, por lo que, a pesar de que Felipe VI mantendría buena relación con sus dos suegros, no parece impedimento para que Letizia ignore completamente a su padre, por lo cual, la infanta Sofía debe hacer lo mismo.