La infanta Elena es la hija favorita de Juan Carlos I y tiene una reputación considerable, por lo que estas características hacen que sea una mujer más que deseada por cualquier aristócrata, y se sabe de algunos que han intentado tener una relación más profunda con la infanta, pues han querido conquistarla. Sin embargo, tal parece que esto no está en las prioridades de la hija de Juan Carlos I desde su divorcio con Jaime de Marichalar, el cual, por cierto, ya tiene muchos años.
Durante todo este tiempo la infanta Elena no ha estado con ningún hombre, o al menos no con uno del que se tenga registro, aunque está llevándose mucho mejor con uno de sus amores del pasado, Luis Astolfi, aunque dudamos de que tenga una relación mucho más amorosa con el jinete, por lo que lo lógico sería pensar que solo tienen una muy buena amistad.
Sin embargo, pese a todo lo que acabamos de decir, lo cierto es que la infanta Elena tiene a un hombre especial en su vida, uno que siempre ha estado con ella y que es el pilar de su vida (dicho por la misma hermana del rey). ¿Quién es este hombre? Pues la respuesta quizás no es la que muchos se esperan, pues se trata de nada más y nada menos que de Juan Carlos I.
Juan Carlos I es el único hombre en la vida de su hija
Desde muy pequeña la infanta Elena demostró un gran vínculo con su padre, al cual quería en demasía, aunque esto no ha cambiado mucho. La infanta adora a su padre y haría lo que fuera por él, y desde el divorcio que tuvo con Jaime de Marichalar, la infanta Elena se ha centrado mucho más en su padre. De hecho, en la actualidad está muy pendiente del rey emérito, sobre todo por la avanzada edad que tiene ya el padre de Felipe VI.
La hija mayor de Juan Carlos I es la que ha estado muy pendiente de él durante los últimos años. Desde el exilio del emérito la infanta Elena está muy atenta a la situación del mismo, lo llama cada día y también lo ha visitado a Abu Dabi en más de una ocasión, demostrándole a todo el mundo el profundo amor que tiene por su padre.
No solo eso, sino que también ha recibido al emérito en España cuando este ha vuelto en ocasiones puntuales (como para las regatas de Sanxenxo o para el cumpleaños de la princesa Leonor). De hecho, ya que mencionamos el dichoso cumpleaños de la princesa de Asturias, cabe destacar que la hija mayor de Juan Carlos I le dejó claro a Felipe VI que si su padre no era invitado ella no asistiría. Debido a la presión de las hermanas fue que el emérito pudo estar presente en el cumpleaños de Leonor de Borbón, y podemos intuir que durante todos los años venideros la infanta Elena estará muy pendiente a su padre como costumbre, aunque también intuimos que no necesita a ningún otro hombre en su vida que no sea su padre.