Los que siguen desde hace años la actualidad de la casa real española sabe muy bien que la relación entre JuanCarlos I y su hija la infanta Elena es más que buena. De hecho, no es que sea precisamente ningún secreto que con su hija Elena es con quien mejor relación tiene de todos sus hijos.
No es casualidad entonces que la hermana mayor de el rey Felipe VI sea una de las que más está presionando a su hermano y a la institución para que den el OK al regreso definitivo de su padre traspasaría unos cuantos años en Abu Dabi.
Eso sí, más allá de que tengan una buena relación, parece ser que la infanta Elena ha tenido ya muchos años para aprender ciertas maneras de proceder a su padre, que en muchas ocasiones no es que hayan sido precisamente las más indicadas para guardar la imagen de la institución.
La infanta Elena sigue los pasos de su padre
En este sentido, no es que sea precisamente ningún secreto que el rey Juan Carlos hizo y deshizo durante muchísimos años a su antojo en Zarzuela. Más allá de todo lo que se refiera su vida extra matrimonial, uno de los principales focos de selección de la prensa, no son pocos los que quieren poner el foco en todo el tema económico, entre otras cosas porque ya se sabe que, mientras era rey y incluso después, Juan Carlos I llevó a cabo una serie de estrategias para hacerse cada vez más rico.
Y una de ellas no era otra que la de vender algunos de los regalos que le habían hecho como jefe de Estado. Así, es de sobra conocido que JuanCarlos I tenía una especial predilección por los coches deportivos y muy caros, coches que en muchos casos le regalaban en sus visitas de Estado especialmente a estados de Oriente Medio y que, una vez ya se había cansado de ellos, en vez de entregarlos a patrimonio nacional, algo que debería ser lo lógico, los vendía para sacarse así un sueldo extra.
Y parece ser que esta manera de proceder también hace tiempo que la está llevando a cabo su hija, la infantaElena, aunque de una forma mucho más sencilla y con cosas mucho menos ostentosas que grandes deportivos, que en su caso serían bolsos o pequeños regalos que le han ido haciendo durante su vida como miembro de la casa real española.