La infanta Elena tiene un plan para ser “rica”, pues a diferencia de su hermano el rey, no tiene una fortuna. Sin embargo, su padre sí que tiene una fortuna y este está preparando su herencia, lo cual significaría el momento perfecto para que la infanta Elena se pueda hacer con una buena cantidad de dinero sin esfuerzo, ya que ella no ha rechazado la herencia de su padre y este está dispuesto a dejarle una buena parte de lo que tiene.
Recordemos que la relación entre la infanta Elena y Juan Carlos I es especial, tanto que el emérito considera a la infanta Elena como su hija favorita, y no es para menos, ya que la Borbón siempre ha estado ahí para él en las buenas y en las malas. De hecho, en las últimas regatas de Sanxenxo en las que estuvo el emérito, su hija favorita estaba con él acompañándole.
Sin embargo, de vuelta al tema de la herencia, lo cierto es que hay un problema, y es que el dinero de Juan Carlos I no puede llegar a España así como así, sino que tiene que pasar por Hacienda ante, y este es un impedimento que debe solucionar la infanta si quiere recibir su parte de la herencia, aunque ya tiene un plan.
Abu Dabi y Froilán figuran en el plan
Aunque Froilán quiere volver a España pues está harto de la ciudad árabe, su madre y también su abuelo lo están teniendo en cuenta para el plan que tienen respecto a la herencia. Abu Dabi es un paraíso fiscal, razón del por qué el emérito escogió este destino para alejarse de su país. Ahí puede tener su dinero sin problema y si se lo pasa a otra persona en forma de herencia no habría problema alguno ni mucho menos ningún ente que esté metiendo las narices, y esto es perfecto.
El plan de la infanta Elena es que Juan Carlos I le de su parte a Froilán, quién vive en Abu Dabi, para que así Hacienda no pueda ni ponerle un dedo encima a lo que la infanta reciba. Es un buen plan, y al parecer el emérito está planeando lo mismo con su otra hija, la infanta Cristina, la cual lo tiene más fácil, pues ella directamente reside en Suiza, otro paraíso fiscal más.
Felipe VI se ha negado a recibir cualquier herencia
A diferencia de sus hermanas, el actual rey de España no quiere ni un euro de su padre, pues quiere evitar ensuciar su imagen pues son muchos los que ven el dinero del emérito como uno sucio. Es por esto que Felipe VI no recibirá herencia de su padre y tampoco lo harán sus nietas, aunque sus hermanas están más que dispuestas en recibir parte de la fortuna de Juan Carlos I, la cual está valorada en más de 2.000 millones de euros, una barbaridad se mira por donde se mire.