En la familia real ni siquiera las vacaciones parecen ser días de descanso para los reyes. Lo que deberían ser las tradicionales vacaciones anuales en Marivent se están convirtiendo en un conflicto de intereses, totalmente contrario a lo que se esperaba, y a lo que seguramente esperaba la reina Sofía, quien desde hace más de un mes ha estado religiosamente organizando lo que serían unas vacaciones perfectas, en familia, sin problemas, pensando que todo saldría bien, hasta que llegaron los días previos, en los cuales todo se fue derrumbando poco a poco.
Para empezar, se informó que la reina Letizia estaba totalmente en desacuerdo de ir a Marivent si es que las hermanas de Felipe VI, las infantas Elena y Cristina, se presentaban, lo evitó a toda costa y, de haber intentando influir de alguna forma, lo consiguió exitosamente.
Las infantas no se detendrán en Marivent, al menos no de momento
En un principio se esperaba que la emérita, el rey, sus hermanas y los respectivos hijos de todos hicieran vida en Marivent por algunos días, el único excluido de los planes era Juan Carlos I, que aunque se le permitiera, estaría en Sanxenxo para las regatas, en las cuales además se le ha visto acompañado por una misteriosa mujer y además, por su hija Elena, que ha cambiado Marivent por Sanxenxo.
La infanta Elena es la hija del emérito que más le ha tendido la mano pese a que la casa real se lo intente restringir, pues si de algo estamos seguros es que Letizia, a pesar de alejar a la familia de Felipe VI de Zarzuela, igualmente procuraría que se mantengan distanciados entre ellos, se planeaba que la infanta Elena estuviera presente en Marivent al igual que sus hijos, pero finalmente todo fue tirado por tierra en último momento, probablemente no le haya resultado muy difícil cambiar sus planes en vista de que la relación con su hermano y cuñada es cada vez peor.
Por su parte, la infanta Cristina también tenía todo preparado para asistir a sus rutinarias vacaciones anuales de Marivent, se repite el caso de su hermana, pues se esperaba que sus hijos también asistieran. Habría representado un descanso de todo el tema del divorcio de la infanta con Iñaki Urdangarin, pero finalmente tampoco estuvo presente esta semana en Marivent, ¿motivos?, los mismos que los de la infanta Elena.
Una hermandad que solo existe en la sangre
Con el paso de los años, las relaciones dentro de la familia real han ido a peor, especialmente si nos fijamos en los tres hijos de Juan Carlos I, que a día de hoy apenas pueden verse, incluso esto se refleja en la relación de las hijas del rey con sus primos, no hay ningún tipo de feeling, directamente no existe una relación, probablemente Letizia haya hecho hasta lo imposible por evitar que sus hijas se lleven con la familia que tanto se ha esforzado en alejar, pero en el instante actual, lo que ocurre en Marivent es el reflejo de la situación constante de la familia real.