A diferencia de un problema matrimonial convencional, cuando en la realeza alguien tiene un problema se convierte en un asunto familiar, y como ejemplo reciente tenemos el divorcio de la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin, donde estaban relacionados Juan Carlos I e incluso Felipe VI. Los motivos eran claros, el ex duque de Palma sabía cosas que podían comprometer al rey en la delicada situación que está ahora junto a Letizia, además de todo el caso de Jaime del Burgo y su amorío con la consorte.
En el caso de los reyes no han llegado al divorcio porque sería algo que compromete a toda la familia, e incluso a la corona como institución. Se pone en riesgo incluso el puesto de Leonor de Borbón como heredera de Felipe VI y es por todo esto que el rey y en especial la consorte han evitado esta salida todo lo posible. Sin embargo el cese de convivencia resulta bastante viable, pues cada uno estaría por su lado pero continuarían ejerciendo sus funciones y asistiendo a eventos juntos, pero hasta ahí.
Ya había rumores sobre Letizia y Jaime del Burgo, la infanta Cristina se enteró
El conocer que la reina consorte y Jaime del Burgo estaban en una relación es algo que públicamente se conoce desde hace relativamente poco, pero los rumores y comentarios no faltaron y a raíz de esto no solo se habría enterado la infanta Cristina, sino que lo sabía desde antes que su propio hermano se enterase.
Sabemos que el rey Felipe VI se enteró hace bastante tiempo de la deslealtad de Letizia, por lo que tuvo bastante tiempo para asimilarlo, y esto no tiene mucho que ver con sus comportamientos actuales pues se deben más a la reacción del público que cualquier otra cosa, por lo que el que su hermana se haya enterado incluso antes que él dice mucho sobre lo que se hablaba sobre su esposa.
Hay un lugar que Letizia y Jaime del Burgo frecuentaron mucho durante el tiempo que estuvieron juntos, un hotel que por su nombre podría considerarse incluso una ironía del destino. Dicho establecimiento está ubicado en Barcelona y no es otro que el Hotel Juan Carlos I, nombrado en honor al padre de Felipe VI, enemigo jurado de la consorte y una persona que ella siempre se esforzó en alejar por manchar la imagen de la corona de la misma forma que ella terminó haciendo años después.
La infanta Cristina se habría enterado de aquellos rumores sobre Letizia y por esto se habría puesto en contacto con su hermano Felipe VI para advertirle de las acciones de su esposa. En este sentido desconocemos si el entonces príncipe de Asturias hizo caso o no a las advertencias de su hermana, quien ya estaba en el ojo mediático por el caso Nóos y no tenía la mejor imagen frente a otros miembros de la corona, pero indiferentemente de todo esto puede decir que lo que ella sabía se hizo de conocimiento público años después.