La infanta Cristina e Iñaki Urdangarin pondrán fin a su relación este mes de junio, cuando Irene Urdangarin cumpla la mayoría de edad. De este modo no tendrán que implicar a ninguno de sus hijos en el divorcio. Ambos estamparán su firma en acuerdo de divorcio con el que dejarán de ser marido y mujer tras más de dos décadas de amor.
La hermana de Felipe VI lleva meses negociando un acuerdo con su todavía marido y padre de sus hijos, que incluye una cláusula por el que ella le dará una pensión, a cambio de que no haga declaraciones sobre ella o la familia real, ni publique un libro por el que una editorial le habría ofrecido 2 millones de euros.
Juan Carlos I es quien está asesorando a su hija en todo este proceso. Le ha recomendado que termine ya con las negociaciones y cierre un acuerdo definitivo. “El emérito ya ha dado luz verde al acuerdo millonario y asegura que él asumirá el coste extra que suponga”, a fin de que no se convierta en un espectáculo ni suponga un riesgo para la imagen de la monarquía.
El matrimonio estaba a punto de cerrar un acuerdo que contemplaba una pensión a Iñaki Urdangarin de 25.000 euros mensuales, más dos millones de euros, en concepto de indemnización. Sin embargo, a raíz de que esta información se hiciese pública, el ex jugador de balonmano habría aumentado sus pretensiones, asegura el colaborador, llegando a “pedir más dinero y en un solo pago”.
Ahora bien, el pago a Iñaki Urdangarin se haría mediante una “donación a su hija”, de esta forma, según especificaron en Cuatro al día, “al ser dos personas con domicilio fiscal fuera de España, él en Abu Dabi y Cristina en Suiza, donde reside desde 2013, en España solo sería Iñaki el que tendría que asumir la fiscalidad de esos ingresos”. Es decir, “solo podría investigarse lo que reciba Urdangarin, que sí tributa en España”.
Una fórmula que, sin embargo, sí afecta a la infanta Cristina. Porque para que la todavía esposa de Iñaki Urdangarin no tenga que declarar nada, “no podría residir en España, aunque quisiera, hasta dentro de cuatro años, cuando prescriba”. En otras palabras, la infanta tendría que pasar 4 años más en Suiza por esta entrada de dinero si no quiere tener que pagar impuestos. De lo contrario le complicaría la vida en España.
Infanta Cristina terminó en Suiza por problemas de Iñaki Urdangarin
El traslado a Suiza se produce tras la implicación de Iñaki Urdangarin en el caso Nòos, el instituto sin ánimo de lucro por el que supuestamente el Duque de Palma se estuvo lucrando durante años junto al otro cabecilla de la trama, Diego Torres.
El hecho de que el destino de la infanta y sus cuatro hijos sea precisamente Suiza llama aún más la atención por la coincidencia de una de las acusaciones que pesan sobre el exjugador de balonmano español: la de haber cobrado 375.000 euros en un banco suizo de la empresa Aguas de Valencia.
El trabajo de la infanta Cristina
La infanta Cristina trabaja en la fundación desde el año 1993. Su primera ocupación fue en la coordinación de exposiciones de artes visuales y fotografías. En 1997 fue designada coordinadora del programa de Cooperación Internacional y en 2005 fue nombrada directora del Área Social. Y en 2009 asumió la dirección del Área Internacional.