Inesperado resultó cuando en enero de 2022 explotó una bomba en la realeza, el matrimonio de Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina estaba en lecho de muerte, y desde entonces han pasado más de un año y medio, casi dos, en el proceso de divorcio. Todo apuntaba a que no pasarían de los 18 meses de disputa legal. De hecho, el pasado mes de junio de 2023 el final del divorcio ya tenía día fijado, precisamente el día 5, cumpleaños de Irene Urdangarin, la menor de los cuatro hijos del matrimonio, quien al cumplir la mayoría de edad habilitaba la posibilidad de cerrar el divorcio mediante notaría, un proceso que se esperaba ocurriría en Suiza el día ya mencionado.
Muchos dieron por hecho que llegaba el final de todo, que el ex duque de Palma saldría de la puerta de la notaría con un mucho dinero y finalmente todos esos peligrosos secretos que maneja Iñaki Urdangarin quedarían ocultos por, según rumores, 2 millones de euros más una compensación mensual, aunque esto presuntamente ha sido desmentido.
Iñaki Urdangarin no gana una, ni con el divorcio, ni con su trabajo
Ya sabemos que nada de esto pasó, el aún esposo de la infanta Cristina tendrá que esperar para ver su cuenta bancaria a reventar. No solo ha sido problemático para Iñaki Urdangarin su divorcio, tampoco ha tenido demasiada suerte en el campo laboral. Sus antecedentes penales le están pasando factura de forma inevitable.
El caso Nóos fue un duro golpe tanto para la infanta Cristina como para el ex duque de Palma. En el momento que todo se destapó fue un escándalo de proporciones mundiales, al punto que otros nombres salieron a la luz, nombres importantes como Juan Carlos I, el cual igualmente se ha visto involucrado en el divorcio de su hija e incluso se rumorea estaría pagando una buena parte de la compensación de Iñaki Urdangarin. Por esta parte el haber estado en prisión le vino de perlas, pero debería seguir probando suerte si desea trabajar.
Junto a los rumores de que el 5 de junio se firmaría el divorcio, se habló además de una novedad laboral para el ex balonmanista pues luego de divorciarse le esperaba no una, sino dos jugosas ofertas de trabajo y que le remunerarían extremadamente bien. Aseguraban que Iñaki Urdangarin sorprendería a todo el mundo, pero la sorpresa fue para quienes redactaron estas palabras al ver que nada de lo que aseguraban ocurrió, y, en realidad, esas dos ofertas de trabajo habrían rechazado la postulación del ex duque de Palma, dejándolo en la calle de no ser porque, a pesar de estar desempleado y no haber cobrado el dinero del divorcio, se puede intuir que está recibiendo ayuda de la realeza para mantener su elevado estilo de vida pese a su precaria situación laboral.
El nombre de Felipe VI sale este caso, pues el rey estaría dando un cojín a su cuñado a la vez que se interesa en el divorcio como su padre. Parece ser que hay secretos que realmente no quieren que salgan a la luz.