En el mundo de la realeza, los escándalos y las intrigas amorosas siempre tienen un lugar destacado, y esta vez, Iñaki Urdangarin y su nueva pareja, Ainhoa Armentia, están en el centro de la tormenta. Paloma García Pelayo, la periodista que ha seguido de cerca este drama real, revela detalles exclusivos que ponen en duda el futuro de esta pareja y el proceso de divorcio con la infanta Cristina.
El divorcio entre Iñaki Urdangarin y la infanta Cristina parecía estar avanzando, con un acuerdo económico y un reparto de responsabilidades ya en marcha, pero aquí es donde la situación se complica. La firma del acuerdo se ha convertido en un punto de conflicto, ya que Cristina no ha dado el paso decisivo y prefirió alejarse e irse de vacaciones en el momento crucial de la firma. Esta demora no se debe a razones emocionales, ya que la relación de Urdangarin con su nueva pareja se ha mantenido firme. Entonces, ¿por qué la demora? La respuesta sigue siendo un misterio.
La presión de Ainhoa Armentia
En medio de este tenso proceso de divorcio, surge el nombre de Ainhoa Armentia, la nueva pareja de Iñaki Urdangarin. Según las fuentes, Armentia estaría instando a Urdangarin para que firme el divorcio lo más pronto posible. Parece que Ainhoa no está dispuesta a seguir siendo la amante del ex duque de Palma y está presionando para convertirse en su esposa. Esto ha generado tensiones y discusiones en la relación, incluso se rumorea que han tenido una fuerte pelea recientemente. Fuentes cercanas a la pareja confirman un evidente distanciamiento entre Urdangarin y su novia. Aunque no se ha confirmado una ruptura, la relación ya no es la misma. La pregunta que se plantea es clara: “¿o te divorcias o terminamos?”. De este modo, todo parece indicar que el ex jugador de balonmano está atrapado entre dos decisiones que podrían cambiar su vida para siempre.
La infanta Cristina da un giro inesperado
Pero la verdadera sorpresa llega con el movimiento inesperado de la infanta Cristina. Según se ha revelado, la hija del rey emérito ha tomado la decisión de prohibir explícitamente que Iñaki Urdangarin contraiga matrimonio con Ainhoa Armentia. La razón detrás de esta prohibición es clara: Cristina no está dispuesta a financiar la vida lujosa de la novia de su exmarido. No quiere cargar con "las facturas" de Armentia.
Además, la hermana de Felipe VI ha establecido dos condiciones claras para que Urdangarin mantenga la pensión mensual de 25,000 euros que ella le proporcionaría a partir del próximo mes. La primera es que no viva en Barcelona, para evitar que se acerque a su círculo de amigos. La segunda, ya conocida desde hace tiempo, es que no revele información sobre su matrimonio ni sobre el caso Nóos. Esta última regla podría haber frustrado los planes de Urdangarin de publicar sus memorias, en las cuales planeaba hablar sobre los eventos de los últimos años de su vida.
El drama real de Iñaki Urdangarin, Ainhoa Armentia y la infanta Cristina parece estar llegando a un punto crítico. ¿Aceptarán las condiciones de la infanta y firmarán el divorcio, o se verán envueltos en un conflicto que amenaza con poner fin a la historia de amor del ex duque de Palma y 'la administrativa', como es conocida Armentia en Vitoria? Solo el tiempo lo dirá.