Desde su salida de la Familia Real, el príncipe Harry y Meghan Markle han enfrentado una serie de desafíos que han sacudido su estabilidad financiera. Rumores de préstamos, pérdida de contratos millonarios y una supuesta vida más allá de sus posibilidades han acaparado los titulares.
La partida de los duques de Sussex de la Casa Real británica ha dejado huellas evidentes en sus finanzas. La supuesta solicitud de un préstamo al príncipe Guillermo para sostener el extravagante ritmo de vida de Meghan ha encendido las alarmas. ¿Será que los gastos desmedidos y las lujosas vacaciones se han vuelto inmanejables para el duque de Sussex? Todo parece indicar que sí.
El estilo de vida de Meghan Markle, ¿la raíz de los problemas económicos?
La disminución notable de sus ingresos ha llevado a que sus lujosas vacaciones, como su reciente viaje a la isla de Canouan en el Caribe, los vuelos en aviones privados y la ropa de diseñador sean cosas del pasado. Por consiguiente, no es sorprendente que, en este escenario, la relación matrimonial de los duques de Sussex se haya deteriorado. Es probable que las circunstancias hayan forzado a la pareja a ajustar su estilo de vida y a poner en venta su casa en Montecito, California. Esta última noticia ha sido difundida por varios medios, afirmando que la pareja ha puesto en el mercado su mansión por 12 millones de euros.
Además, el informe fiscal más reciente de su fundación, ‘Archewell’, reveló una marcada disminución en las donaciones, descendiendo de 13 millones de dólares en 2021 a casi dos millones en 2022. Se registró una pérdida patrimonial de aproximadamente 675,000 dólares, ya que los gastos superaron los ingresos el año pasado, y en 2023 los números continuaron en declive. Aunque algunas fuentes destacan que no es inusual que las donaciones disminuyan después del primer año de una organización benéfica, ya que suelen alcanzar su pico económico al inicio, esta situación representa un momento financiero delicado para los Sussex.
Pérdidas millonarias en acuerdos comerciales: Spotify y Netflix se retiran
Este acontecimiento se suma a la difícil situación económica que han enfrentado en los últimos meses. En primer lugar, la cancelación de su contrato con Spotify: un acuerdo valuado en aproximadamente 20 millones de dólares. Según fuentes cercanas a la plataforma de audio, la pareja no cumplió con los requisitos de producción necesarios para recibir el pago completo. Solo entregaron una serie de 12 episodios, lo que llevó a la cancelación del contrato, como informó ABC en su página web. Además, un ejecutivo de la plataforma los calificó como "estafadores".
Además, la plataforma Netflix también anuló un proyecto de serie animada dirigida por Markle y otros proyectos que no contaron con la aprobación de los accionistas. Estas cancelaciones estuvieron vinculadas a que los proyectos no abordaban los conflictos entre los Sussex y la Familia Real británica, un tema que ha sido objeto de debate desde el ‘Megxit’ en 2020.
Así que, aunque el príncipe Harry y Meghan Markle renunciaron al uso de sus títulos de alteza real al no ser miembros activos de la familia real, y dejaron de recibir fondos públicos del presupuesto soberano otorgado por el rey Carlos III, gran parte de sus ingresos y el respaldo financiero para el lujoso estilo de vida de la ex actriz de 'Suits' tienen vínculos directos con la Corona británica.